WASHINGTON.- El Presidente de Estados Unidos, George W. Bush, advertirá esta noche que la guerra contra el terrorismo global acaba de comenzar, anunció la Casa Blanca.
Bush dirigirá ante el pleno de las dos cámaras del Congreso un mensaje sobre el Estado de la Unión a las 02:01 GMT (10:00 de la noche en Chile) del miércoles en el que resumirá el primer año de su gestión en el gobierno de Estados Unidos, y en donde identificará a varios "estados peligrosos", señalando que Estados Unidos no les permitirá convertirse en una amenaza para el mundo.
"Estados Unidos no permitirá que los regímenes más peligrosos del mundo nos amenacen con las armas más peligrosas del mundo", dirá Bush, según extractos de su discurso adelantados por la Casa Blanca.
El extracto no identifica a los "estados paria" por su nombre, pero funcionarios afirmaron que Bush hará referencia específica a Irán, Irak y Corea del Norte, en su intervención, que será seguida por decenas de millones de estadounidenses en directo por las grandes cadenas de televisión.
Bush justifica igualmente la duplicación a 38.000 millones de dólares del presupuesto de seguridad interior, centrado sobre cuatro sectores clave: "bioterrorismo, servicios de urgencia, seguridad aérea, y mejoramiento de servicios de información".
El presidente, según los extractos divulgados, desarrollará también en forma extensa sus planes para revitalizar la economía estadounidense y poner fin a la recesión.
"Cuando Estados Unidos trabaja, Estados Unidos prospera, y mi plan económico se resume a una sola palabra: empleo", según los extractos adelantados del discurso.
De acuerdo con la Casa Blanca, el mandatario debe subrayar que la creación de buenos empleos depende de la puesta en práctica de un buen sistema educativo, de un aprovisionamiento regular de la energía con precios aceptables, de la ampliación de los intercambios comerciales y de una política fiscal sana.
Bush debe también poner el acento sobre la importancia de los beneficios sociales (retiro y salud) para asegurar la seguridad económica de todos los estadounidenses.
El discurso presidencial llama al Congreso a aprobar sobre los asuntos interiores "con el mismo espíritu de cooperación que hemos puesto en marcha en nuestra guerra contra el terrorismo".
Bush debe concluir su alocución estimando que es una ocasión única para buscar tanto en el interior como en el exterior de sus fronteras el espíritu solidario creciente tras los atentados del 11 de septiembre "a fin de conducir al mundo con los valores que le aportarán una paz durable".
