BUENOS AIRES.- Una misión del Fondo Monetario Internacional (FMI) comenzó hoy, miércoles, en Buenos Aires las reuniones con autoridades de Argentina para sentar las bases de un nuevo acuerdo crediticio ante la grave crisis económica del país sudamericano.
La delegación del FMI, encabezada por su director para América Latina, el argentino Claudio Loser, mantuvo una primera reunión con el ministro de Economía, Jorge Remes Lenicov, y el secretario de Hacienda, Oscar Lamberto, informaron a EFE fuentes gubernamentales.
Las partes pasaron revista a las directrices del proyecto de presupuesto nacional de este año, que fija un déficit público de unos 1.900 millones de dólares y una caída del 5 por ciento en el Producto Interior Bruto (PIB) argentino, indicaron.
El proyecto presupuestario, que debe ser aprobado por el Parlamento, prevé también una inflación del 15 por ciento anual y una caída de 6 puntos porcentuales en la recaudación de impuestos respecto a 2001, apuntaron.
En las próximas horas se analizarán otros detalles del proyecto y la situación del sector financiero, sobre el que desde diciembre pesan restricciones al uso de dinero en efectivo y además retiene millonarios depósitos en los bancos.
La agenda de la misión del FMI, que regresará mañana, jueves, a Washington, incluye reuniones con el presidente del Banco Central, Mario Blejer, antiguo funcionario del organismo financiero internacional que asumió el cargo hace quince días.
En los últimos días, el FMI ha ratificado su decisión de ayudar a superar la grave crisis que sufre Argentina, la tercera economía de América Latina, pero al mismo tiempo pidió al Gobierno de Buenos Aires que presente un plan "sustentable".
El organismo financiero internacional suspendió la ayuda a este país suramericano en noviembre pasado, a causa de un incumplimiento en las metas de déficit público pactadas en el acuerdo crediticio vigente.
Argentina, cuya economía está en recesión desde mediados de 1998, aspira a conseguir créditos por al menos 15.000 millones de dólares, según informaciones extraoficiales.
El viceministro de Economía, Jorge Todesca, dijo el martes que parte de los créditos del FMI se destinarán a fortalecer las reservas en divisas del Banco Central y liberar la cotización del dólar, como recomendó el organismo internacional.
Todesca señaló que el Gobierno aspira a lograr una "flotación serena" de la moneda estadounidense en el libre mercado de divisas, que actualmente coincide con un tipo de cambio de 1,4 pesos por dólar regulado para el comercio exterior.
Esta política monetaria rige desde el 6 de enero, cuando se puso fin a la convertibilidad o paridad del peso con el dólar que se aplicaba desde el 1 de abril de 1991.
El viceministro de Economía admitió que a Argentina le llevará tiempo recuperar la confianza internacional tras haber suspendido los pagos de su deuda pública exterior, que suma unos 79.300 millones de dólares, otro de los asuntos que preocupan al FMI.
Desde comienzos de diciembre pasado rigen restricciones para el uso de dinero en efectivo y los bancos retienen millonarios depósitos, dentro de una serie de medidas dispuestas por el Banco Central para evitar una fuga de capitales.
El presidente argentino, Eduardo Duhalde, que asumió el poder el 1 de enero, ha dicho que el sábado anunciará un plan económico "sustentable" y consideró que los programas del FMI que se aplicaron durante los años 90 "fueron el mismo remedio que se usa para países con distintas enfermedades".