ALMERIA.- Un sismo de 4,8 grados en la escala de Richter, una magnitud poco común para España, sacudió anoche la provincia de Almería, en el sur del país, y causó una gran alarma en la población, si bien no hubo heridos y los daños causados fueron escasos, informaron hoy las autoridades de protección civil.
Según el Instituto Geográfico Nacional, el epicentro estuvo localizado en el sur del término municipal de Gérgal, perteneciente a la comarca del Andarax, donde también fue sentido, aunque con menor intensidad, el movimiento sísmico, al que siguieron varias réplicas menos fuertes, incluso hoy.
En el municipio de Pulpí, el terremoto causó la caída de una torreta de alta tensión, por lo que varias localidades de la comarca se quedaron sin suministro eléctrico durante más de una hora.
El movimiento telúrico, que se produjo un día después del terremoto que en Turquía dejó más de cuarenta muertos y miles de damnificados, causó "una alarma tremenda" entre la población, que salió a la calle muy asustada y "se negaba a acostarse en el interior de sus viviendas", dijo hoy la alcaldesa de Gérgal, María Leonor Membrive Gómez.
Agregó que la normalidad no se recobró hasta entrada la madrugada, cuando la mayoría de los habitantes finalmente regresaron a sus casas.
Técnicos de la Delegación de Obras Públicas de la Junta de Andalucía anunciaron una inspección de los inmuebles afectados, ya que en muchos de ellos se aprecian ’’bastantes grietas’’, añadió la regidora local.
A comienzos de la década de los noventa, la provincia de Almería vivió una crisis sísmica que se prolongó durante varios meses y que afectó sobre todo al municipio de Adra y su comarca, donde se produjeron importantes grietas en edificios, aunque sin causar daños.
