ISLAMABAD.- El principal sospechoso en el secuestro de Daniel Pearl, el jeque Ahmed Omar, confesó haber secuestrado al periodista estadounidense, desaparecido hace tres semanas, pero por el momento se desconoce su suerte, anunció el miércoles la policía paquistaní.
El arresto del principal sospechoso y los primeros interrogatorios no han permitido descubrir el misterio que circunda al destino del periodista estadounidense del Wall Street Journal.
El militante islamista jeque Ahmed Omar, de 29 años, nacido en Gran Bretaña y arrestado el martes, admitió haber ordenado el secuestro, pero dijo ignorar dónde se hallaba el periodista, informaron fuentes policiales el miércoles.
En un interrogatorio preliminar llevado a cabo justo después de su detención en Lahore (este de Pakistán), Omar dijo que creía que el periodista estaba vivo, según la policía.
El jeque Omar era objeto de una operación de intensa búsqueda de la policía paquistaní, apoyada por el FBI (policía federal de Estados Unidos).
Su captura es el avance policial más importante desde que Daniel Pearl, de 38 años, desapareció el 23 de enero en Karachi (sur de Pakistán), donde investigaba a grupos islamistas.
El inspector general de policía, Syed Kamal Shah, declaró sin embargo que no sabía si Pearl seguía con vida. "Mientras no lo hayamos encontrado, no podremos estar seguros. Hasta el presente no existe elemento alguno que nos permita decir que está muerto", confió a la AFP.
El interrogatorio del jeque Omar "continúa. Habla, pero es difícil lograr que se quiebre. Esperamos que terminará por decir la verdad", dijo el miércoles a la AFP un responsable de la investigación en Karachi, interrogado por teléfono desde Islamabad.
Fuentes policiales también indicaron que Omar señaló que varias personas estaban implicadas en el secuestro de Pearl y que creía que éste seguía vivo. Su último contacto con los secuestradores en Karachi data de hace varios días, cuando se encontraba en Lahore.
Después de haber sido arrestado en Lahore, el jeque Omar fue trasladado en un avión especial el martes a Karachi, bajo estrecha vigilancia.
El jeque Omar era buscado activamente desde que fue designado por otros tres sospechosos como el origen de los mensajes electrónicos en los que los secuestradores se atribuían el secuestro y presentaban sus exigencias.
Estos mensajes contenían fotos que mostraban a Pearl cautivo y con una pistola en la sien. Fueron enviados a los medios paquistaníes hace unas dos semanas. Uno de los mensajes declaraba que Pearl moriría el 1 de febrero si no se satisfacían las exigencias de los secuestradores.
Uno de los requerimientos era mejor trato para los presuntos talibanes y miembros de la red Al Qaeda capturados en Afganistán y detenidos en la base estadounidense de Guantánamo (Cuba).
Los secuestradores pedían también la liberación de los detenidos paquistaníes. Washington rechazó estas reivindicaciones.
El jeque Omar está considerado por la policía como un alto responsable del grupo islamista Jaish e Mohamad, decretado ilegal por el Presidente paquistaní, Pervez Musharraf, e incluido en la lista de organizaciones terroristas elaborada por Estados Unidos.
El jeque Omar fue sometido a un primer interrogatorio formal que duró cinco horas durante la noche del martes.
"No puedo darles ahora los resultados del interrogatorio, pero tengo esperanzas de que Pearl será hallado muy pronto", declaró a la AFP el ministro del Interior de la provincia de Sindh, Mukhtar Sheikh.