BERLIN.- La última secretaria de Adolf Hitler, quien estuvo en el bunker del líder nazi cuando se suicidó en 1945, murió pocos días después de publicar sus memorias y aparecer en una película, informó el miércoles el director Othmar Schmiderer.
Traudl Junge, de 82 años, murió víctima del cáncer el domingo en la noche, dijo Schimderer a Reuters.
Junge se convirtió en secretaria privada de Hitler en 1942, a mediados de la Segunda Guerra Mundial. Trabajó con el "Fuehrer" hasta su amargo final y redactó la última voluntad y testamento de Hitler antes de escapar del bunker días después.
Después de mantener un bajo perfil por medio siglo, Junge contó su historia en profundidad en una película proyectada en el Festival de Cine de Berlín el domingo y en el libro "Through the Final Hours" ("Hasta las horas finales"), publicado días antes.
"Ella dijo 'ahora he contado la historia de mi vida y estoy lista para morir'", dijo Schmiderer, director del filme. "Tuvimos la impresión de que sentía una pesada carga que se alivió después que contó su historia".
Schmiderer dijo que había hablado con Junge sólo días antes.
"Mientras más vivo y me hago más vieja, es mayor mi sentimiento de culpa", dijo Junge en el documental "Blind Spot, Hitler's Secretary".
"Hoy puedo decir que él era un criminal real", afirmó.
Ella había querido ser una bailarina de ballet, pero cuando oyó que había una vacante en la Cancillería, aprovechó sus habilidades en el tipeo y la taquigrafía para obtener el trabajo.
Ella conoció personalmente a Hitler en su cuartel general Wolf's Lair (Guarida del Lobo) en el este de Prusia, en lo que hoy es Polonia.
"El era un agradable hombre mayor que nos dio la bienvenida en forma realmente amistosa", recordó acerca de su primer encuentro. "Pensé que estaría en la fuente de toda la información. Pero realmente era un punto ciego".
Ella y otras secretarias cenaban frecuentemente con Hitler, pero el Fuehrer evitaba tocar temas polémicos.
"Algunas veces pienso que si tuviese la oportunidad de conocer a Hitler de nuevo, le preguntaría que si descubriera que tiene sangre judía en su árbol genealógico, ¿se habría asfixiado con gas?", dijo en la película.
Bajo el mandato de Hitler, los Nazi exterminaron sistemáticamente a unos seis millones de judíos. El recuento de Junge de los últimos días en el bunker ayudó a los historiadores a tener un panorama de la desesperación y banalidad de los últimos días del Tercer Reich.
Junge estaba allí cuando Hitler besó a su compañera Eva Braun al frente de testigos antes de contraer matrimonio y posteriormente suicidarse.
También pasó un tiempo a solas con Hitler en sus horas finales mientras le dictaba su testamento final.
"Pensé: Ahora sabré lo que realmente pasó", dijo. “Pero todo eran viejas frases como que los judíos eran los responsables (...). Fue enloquecedoramente insensible".
Junge no tuvo hijos, y deja a una hermana que vive en Australia.