MIAMI.- El comandante en jefe de las fuerzas militares colombianas, general Fernando Tapias, dijo que la guerrilla de las FARC "hasta el momento no ha dado muestras de voluntad de paz".
En una entrevista con el número de febrero de la revista "Poder", editada en Miami (EE.UU.), el general Tapias señaló que Colombia entera está esperando si las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) "ahora reactivarán las negociaciones".
Las conversaciones entra la guerrilla y el gobierno se reanudaron el pasado 14 de enero -después que el 9 de ese mes se hubiera anunciado su suspensión- cuando el presidente Andrés Pastrana informó de que continuarían los intentos por lograr la paz que ya se han extendido más de tres años.
Ante la pregunta de qué pasaría si las FARC "buscan de nuevo disculpas para ampliar esta nueva negociación", el general Tapias dijo que eso sería fatal.
"Si eso sucede, las FARC habrán cerrado el camino a las negociaciones de paz. El país no resiste más secuestros, más extorsiones, más ataques a poblaciones, más ataques contra la fuerza pública... Si las FARC no acceden a reducir esas acciones contra la población civil, significa que no tienen ninguna voluntad de paz".
"De momento no ha habido ninguna acción por parte de las FARC para creer en su palabra", añadió el militar, quien se preguntó sobre la posibilidad de creer en un grupo que después de la crisis de enero atacó poblaciones, secuestró a 15 personas y atentó contra la infraestructura eléctrica del país.
Tapias agregó que, en vez de confiar en las FARC, se debe creer en la inmensa voluntad del gobierno y de la comunidad internacional, que lucharon hasta él último momento para que el proceso no se interrumpiera.
A juicio del general Tapias, un factor importante en la continuación de las negociaciones fue que las FARC no querían perder la llamada zona de distensión donde hay aeropuertos "para el narcotráfico y desde donde pueden acceder a gran parte del territorio colombiano".
"Sería interminable la lista de atropellos y violaciones a la ley que han cometido las FARC en la zona de distensión (...) el problema es que quieren la zona pero no la paz ", apuntó.
La zona neutral está en el sur del país, en territorio de los departamentos de Meta y Caquetá, en un área de 42.139 kilómetros cuadrados, que fue desmilitarizada en diciembre de 1998 por orden de Pastrana y se estableció para llevar a cabo en ella negociaciones para un proceso de paz.
El general Tapias añadió que, si se rompe el proceso de paz y se tiene que recuperar la zona entregada a los guerrilleros, el problema no será de tiempo sino de cómo hacer para proteger a la población civil en una operación que será "más de bisturí que de martillo".
Ante una interrogante sobre la posibilidad de una "guerra total" si se acaba el proceso, que se ha mencionado en diversos medios de prensa colombianos, el jefe militar descartó tal posibilidad.
"El escenario de guerra total se lo inventaron los medios de comunicación. La estrategia de las Fuerzas Armadas jamás ha apuntado a una guerra de aniquilamiento ni de exterminio. Nuestra estrategia es debilitar a los agentes generadores de violencia para llevarlos a aceptar soluciones políticas".
El general Tapias agregó que las FARC en este momento sólo reciben ayuda de los narcotraficantes y los traficantes de armas y que "a pesar de que muestran como cabeza a Manuel Marulanda Vélez o "Tirofijo", el tiempo ha demostrado que él no tiene el poder".