BUENOS AIRES.- El gobierno argentino dictó la noche del lunes la "conciliación obligatoria" por al menos 15 días hábiles entre empresas y sindicatos del sector petrolero, suspendiendo la iniciación de un paro por tiempo indeterminado que hubiera causado desabastecimiento de combustible en el país.
Tras una jornada de prolongadas negociaciones en el Ministerio de Trabajo y ante la falta de acuerdo entre las partes, el gobierno dictó la conciliación obligatoria por 15 días hábiles, que podrían prorrogarse, término durante el cual las empresas no pueden despedir empleados y los trabajadores no pueden realizar medidas de fuerza.
"Las partes, los trabajadores y empresarios han acatado la ’conciliación obligatoria’ dictada, por lo que se suspende la medida de fuerza", anunció la noche del lunes en rueda de prensa el ministro de Trabajo, Alfredo Atanasof.
Los sindicatos petroleros habían decidido un paro por tiempo indeterminado, luego de que las empresas petroleras amenazaran con 10.000 a 15.000 despidos por la decisión del gobierno de aplicar un gravámen a las exportaciones de hidrocarburos.
La protesta iba a abarcar las provincias sureñas de Chubut, Santa Cruz, Neuquén y Río Negro, Mendoza (oeste), Salta (noroeste) y Buenos Aires (centro-este), donde están ubicados los principales yacimientos y refinerías de Argentina.
La huelga, que debía empezar entre la tarde y la noche de este lunes, podría haber paralizado el sector y hubiera provocado en una semana el desabastecimiento de combustible en Argentina, según fuentes sindicales.
Ante las presiones de las empresas petroleras para no pagar el impuesto a las exportaciones, el presidente Eduardo Duhalde ratificó el lunes que el sector deberá indefectiblemente "hacer un aporte de 500 millones de pesos" (250 millones de dólares), ya que fue incorporado al Presupuesto para el 2002.
En una rueda de prensa al término de la cumbre del Mercosur en la quinta presidencial de Olivos (periferia norte), que sesionó el lunes en Buenos Aires y pasó desapercibida para los argentinos que continuaron con las protestas, Duhalde aseguró que el gobierno "no va a permitir que se concreten aumentos (de precios) en las naftas y el gasoil".
"En los últimos años, las empresas (petroleras) han tenido grandes ganancias. Es el momento de entender la situación argentina", advirtió Duhalde e insistió en que el sector debe hacer el aporte definido.
No obstante, minutos después de dictada la conciliación obligatoria, la empresa Shell Argentina (anglo-holandesa) anunció que a partir de la medianoche aumentará los precios de sus combustibles para vehículos entre 3, 4 y el 4,9%.
El Gobierno anunció el jueves pasado que a partir del 1 de marzo aplicará un gravamen de 20% a la exportación de petróleo crudo y 5% a sus derivados.
La decisión de crear el impuesto, en enero pasado, había generado fuertes reclamos de las más poderosas petroleras instaladas en Argentina, en particular la española Repsol-YPF, la firma de mayor facturación del país.
Ante el anuncio del impuesto, los empresarios petroleros amenazaron con bajar sus inversiones, lo que haría caer "unos 15.000 puestos de trabajo", estimó el lunes Fernando Roca, portavoz de unas 150 empresas contratistas de Chubut.
El vicepresidente de la empresa Shell Argentina (anglo-holandesa), Juan José Aranguren, advirtió el lunes que la medida impositiva producirá despidos masivos porque las exportaciones "son menos atractivas", lo que provocará "una baja en el nivel de inversión en el sector y en consecuencia el nivel de actividad", con "efectos nocivos sobre la industria".
Guillermo Pereyra, secretario general de uno de los sindicatos petroleros, dijo que la consigna de la huelga es "ningún despido más en el (sector del) petróleo".
El peligro de desabastecimiento y el aumento de precios de combustible profundizaría la crisis económica tras casi cuatro años de recesión, que deja cuatro millones de desempleados y un tercio de la población en la pobreza.
Las protestas de iracundos ahorristas y desocupados siguieron el lunes en las ciudades de Buenos Aires, La Plata y Mar del Plata (sur), en tanto en la provincia de Salta (noroeste), la represión policial a una marcha de desempleados dejó varios heridos, entre ellos una niña que recibió una bala de goma en el rostro, y siete detenidos, según fuentes sindicales.
En enero se prolongó la caída de la producción industrial, al derrumbarse un 18% en relación a igual mes del año anterior y bajar 2,4% respecto de diciembre de 2001, informó este lunes el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC).
