VANCOUVER, Canadá.- La Policía canadiense, que investiga la desaparición de unas 50 mujeres en los últimos 20 años, detuvo y acusó de dos homicidios al propietario de una granja de los alrededores de Vancouver (oeste de Canadá), informaron este sábado las autoridades de la provincia canadiense Columbia Británica.
Robert William Pickton, de 52 años, acusado de haber perpetrado dos asesinatos con premeditación, comparecerá el lunes ante la corte provincial de Port Coquitlam, localidad cercana a Vancouver donde está ubicada la granja de cría de puercos, propiedad conjunta del acusado y su hermano.
Desde comienzos de febrero la policía realiza pesquisas intensivas en la granja.
"Pensamos que hemos encontrado respuesta a la desaparición de dos mujeres. Pero este asunto concierne a más de 50 desaparecidas. Hay muchas cuestiones que no tienen respuesta. No nos detendremos hasta que todos las interrogantes tengan respuesta", dijo la portavoz policial Catherine Galliford.
La Policía inició una búsqueda en la granja hace dos semanas, tratando de hallar los cuerpos de varias prostitutas desaparecidas de la "zona roja" de Vancouver.
Unos 80 agentes trabajan en la "búsqueda detallada, centímetro por centímetro, en la granja, que continuará por muchos meses", dijo Galliford.
La mayoría de las desaparecidas eran adictas a drogas y prostitutas que desaparecieron sin dejar rastros, y algunos familiares se quejaron porque el trabajo que realizaban algunas de estas mujeres llevó a la Policía a investigar las desapariciones con poca profundidad.
Sin embargo, al darse cuenta de la posibilidad real de la existencia de un asesino en serie, las autoridades intensificaron la pesquisa el año pasado.
No fue sino hasta hace dos semanas que comenzaron a aparecer pistas importantes, cuando la Policía, con una orden de allanamiento para buscar armas ilegales, comenzó la búsqueda en la granja de Pickton y su hermano.
Expertos en ADN y otros investigadores rastrean el área con palas mecánicas, tractores y perros, en una investigación que Galliford aclaró que no es como "buscar una aguja en un pajal".
"Es una investigación policíaca precisa, metódica y altamente integrada, en la que están involucradas personas que están desaparecidas", enfatizó la portavoz.
La pesquisa se concentra, particularmente, en un vagón estacionado en la granja, de donde se han obtenido muestras de ADN, y las autoridades han solicitado a los familiares de las desaparecidas que provean muestras suyas para compararlas.