TOKIO.- Un total de 53 ballenas aparecieron varadas y muertas en una playa al nordeste de Tokio y los equipos de rescate luchaban el lunes para salvar a otras 32 y liberarlas en un puerto cercano, dijeron las autoridades locales.
El personal de bomberos y un acuario de la prefectura de Ibaraki subieron en varios camiones a las ballenas que habían sobrevivido y las transportaron al puerto de Hasaki.
Los cetáceos, falsas orcas de cabeza de melón (peponocephala electra) de unos dos metros de largo, fueron hallados el lunes de madrugada.
De las 85 ballenas que se descubrieron, 53 estaban muertas.
Los investigadores examinarán los cadáveres para determinar porqué acabaron en la playa.
"Pudieron haberse perdido mientras perseguían a sus presas o puede ser consecuencia de una enfermedad", dijo un funcionario del departamento de Pesca de la Prefectura.
Otras 10 falsas orcas de cabeza de melón fueron halladas en una playa a 10 kilómetros de distancia el día anterior.
El diario Yomiuri Shimbun informó de que los habitantes de la zona habían desoído las advertencias sanitarias y cortado trozos de los cetáceos para su consumo personal, considerando a las ballenas como "regalos del mar".
Los japoneses tienen costumbre de comer carne de ballena, que se ha encarecido por la prohibición de comerciar con los cetáceos. Toda la carne que llega al mercado proviene del controversial programa científico de ballenas de Japón.
"En principio no creemos que sea buena idea comérselas, ya que pueden estar enfermas", dijo el funcionario, que apuntó que los cuerpos serán enterrados en la franja costera.
Hace un año, 50 ballenas de cabeza de melón se hallaron en la misma zona y la mitad pudo ser rescatada.
