WASHINGTON.- El secretario de Transporte de Estados Unidos, Norman Mineta, se opone a las demandas de que los pilotos porten armas para defender la cabina de secuestros, pero apoyaría las pistolas de descargas eléctricas que incapacitan temporalmente a un agresor, dijo el sábado el Los Angeles Times.
"Creo que las pistolas que atontan son la solución" cuando la persona está debidamente entrenada, dijo Mineta en una entrevista del Times, la primera vez que ha tomado una postura en un asunto con muchos partidarios y opositores.
En las encuestas, alrededor del 80 por ciento de los pilotos de las aerolíneas dicen que se sentirían más seguros si pudieran responder a los agresores con una fuerza letal.
Los sindicatos de pilotos han solicitado al Departamento de Transporte que permita que algunos voluntarios sean entrenados como subalguaciles aéreos y reciban pistolas semiautomáticas.
El viernes, el mayor sindicato de pilotos de Estados Unidos presentó a las autoridades federales un pedido de nuevas normas que permitan a los pilotos portar armas en la cabina de mando de las aeronaves.
La Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas, que representa a 64.000 pilotos en 45 aerolíneas norteamericanas, presentó una petición formal en el Departamento de Transporte, alegando que los pilotos armados son un impedimento para los secuestros.
Hace tres semanas, un copiloto de un vuelo de United Airlines utilizó un hacha para doblegar a un intruso que penetró en su cabina, lo que subrayó los temores sobre la seguridad de las cabinas después de los atentados del 11 de septiembre.
Sin embargo, las aerolíneas se oponen totalmente a que los pilotos porten armas, temiendo que los tiroteos a bordo puedan dañar los aviones y generar demandas judiciales si uno o más pasajeros resultan heridos casualmente.
Según Mineta, los requisitos federales de que las aerolíneas reemplacen las débiles puertas de las cabinas con versiones más resistentes y a prueba de balas podría virtualmente eliminar la posibilidad de que un piloto tenga que recurrir a un arma, dijo el Times.
Las nuevas puertas reemplazarán a las barras temporales de metal instaladas después de los atentados del 11 de septiembre. Actualmente se requiere que la cabina esté cerrada con llave.
"Lo que hemos hecho es reforzar la cabina, lo que implica que la necesidad de armas es mínima", dijo Mineta en la entrevista.
Añadió que se opone a una petición de los sindicatos de asistentes de vuelo de armar con pistolas eléctricas a los sobrecargos y las aeromozas en la cabina de los pasajeros.
"Es una posibilidad real que un arma de éstas pudiera caer en manos equivocadas en la cabina de pasajeros y tengo mis reservas en ese sentido", dijo el secretario de Transporte.
No está claro si el Departamento de Transporte exigirá a las aerolíneas que entregue a los pilotos pistolas eléctricas o simplemente emitirá normas para el entrenamiento y uso y dejará la decisión final en manos de las empresas.
Mineta dijo que sus comentarios representan su posición personal y no la decisión final del departamento. Las aerolíneas esperan una pronta decisión.