RIO DE JANEIRO.- El número de turistas extranjeros que visitó Brasil en el verano austral que termina hoy fue el peor desde 1990, según cálculos de la estatal Empresa Brasileña de Turismo (Embratur) divulgados por el diario "O Globo".
El flujo de turistas extranjeros en el actual verano cayó en un 15 por ciento en comparación con la temporada pasada, según los datos preliminares de Embratur, que esperaba un crecimiento del 10 por ciento en el número de visitantes.
En números, unos 4,6 millones de extranjeros estuvieron en Brasil en los últimos tres meses, contra los 5,3 millones que visitaron el país entre diciembre de 2000 y marzo de 2001.
El verano austral es considerado como la temporada por excelencia del turismo brasileño ya que coincide con las fiestas de carnaval, el período de vacaciones de fin de año en todo el mundo y la estación de invierno en Estados Unidos y Europa, donde procede gran parte de los visitantes.
Embratur atribuyó la reducción del número de visitantes a la retracción de la economía mundial y a la epidemia de dengue que azota a Río de Janeiro, el principal destino de los turistas extranjeros en Brasil.
La estatal también atribuyó la caída del turismo a la crisis económica en Argentina, cuyos ciudadanos lideran la lista de los mayores visitantes del país. El agravamiento de la crisis argentina y la devaluación del peso coincidió con el inicio del verano austral y de la temporada de vacaciones en ese país.
Los argentinos cancelaron en los últimos tres meses 800 vuelos chárter que estaban destinados al estado de Santa Catarina, en el sur de Brasil y en cuyas playas, principalmente las de la ciudad de Florianópolis, acostumbra hablarse en español durante el verano.
El ministro brasileño de Turismo y Deportes, Caio Luiz de Carvalho, calcula que el número de turistas argentinos cayó de cerca de 1,6 millones en cada uno de los últimos veranos a unos 800.000 en la temporada que termina hoy.
Pese a la caída del número de visitantes, Carvalho consideró como positivo el balance del verano dado que el flujo de turistas en todo el mundo apenas creció en un 1,5 por ciento el año pasado, después de haber registrado un aumento del 5 por ciento anual en promedio.