ROMA.- Un grupo que se identificó como una facción del movimiento guerrillero Brigadas Rojas publicó el jueves un mensaje de 26 páginas en la Internet en que se atribuyó la "ejecución" de un asesor del gobierno italiano, en un crimen que sacudió a toda la nación.
Marco Biagi, de 52 años, fue abatido a tiros el martes por la noche en la ciudad norteña de Boloña con la misma pistola que las escurridizas Brigadas Rojas para Construcción de un Partido Comunista Beligerante utilizaron para asesinar a otro asesor del gobierno en 1999.
Las originales Brigadas Rojas son responsables de una serie de asesinatos de políticos, empresarios y policía en las décadas de 1970 y 1980. Su acción más destacada, el secuestro y asesinato del ex primer ministro Aldo Moro en 1978, pretendía derrocar al estado italiano, pero en realidad lo lo reforzó al alienar hasta a sus simpatizantes.
En una diatriba contra el capitalismo moderno, el nuevo grupo declaró en la Internet que "un grupo armado de la organización ejecutó a Marco Biagi" y acusó al asesor del Ministerio del Trabajo de "explotar" a los trabajadores con la reforma laboral que ayudó a preparar.
El asesinato tuvo lugar en un momento de grandes tensiones políticas y sociales en Italia provocados por los esfuerzos para hacer cambios en los tradicionales estatutos sobre empleo y los principales principales sindicatos italianos convocaron a una huelga general.
El primer ministro Silvio Berlusconi hizo un llamado a la unidad y pidió a los dirigentes sindicales que suspendieran la huelga, pero los grupos laborales respondieron que se niegan a doblegarse ante la violencia y seguirán con todo lo planeado en abril.
Sin embargo, también exhortaron a manifestaciones masivas el próximo miércoles para denunciar el terrorismo.
El mensaje de la nueva generación de las Brigadas Rojas, que fue colocado en www.caserta24ore.it, dice que las reformas laborales de Biagi son una "regulación de la explotación de los trabajadores asalariados".
El crimen de Biagi generó nuevos temores de un resurgir del terrorismo político, especialmente después que las autoridades identificaron la pistola como la utilizada por las Brigadas Rojas para matar a otro asesor del Ministerio del Trabajo, Massimo D’Antona, hace tres años.
"La democracia ha sido chantajeada", dijo el jueves el diario La Repubblica.