BERLIN.- La cámara alta del Parlamento alemán aprobó por escaso margen, en una votación que ha ocasionado una disputa legal, una ley de inmigración destinada a admitir personas adiestradas en un oficio o profesión, al tiempo que requiere de los extranjeros que se integren a la sociedad alemana.
La cámara aprobó la legislación por 35 votos a favor y 34 en contra.
Los conservadores, que se oponen a la medida, presentaron un frente común en la votación. Pero el resultado final dependía del estado oriental de Brandenburgo, que está gobernado por una coalición de los socialdemócratas del Canciller Gerhard Schroeder y los democristianos conservadores.
Los ministros del estado no lograron ponerse de acuerdo sobre una posición común, y el gobernador socialdemócrata, Manfred Stolpe, hizo caso omiso de la posición de su ministro estatal del Interior, Joerg Schoenbohm, de filiación conservadora, y votó en favor de la medida en nombre del estado.
Otros conservadores dijeron que el procedimiento invalidaba la votación.
El viernes, el ministro federal del Interior Otto Schily instó a los democristianos a cejar en su oposición.
El año pasado, una comisión gubernamental determinó que Alemania necesita decenas de millares de nuevos inmigrantes cada año para ocupar aquellos puestos de trabajo que su población nativa -en vías de envejecimiento y reducción demográfica- no alcanzará a llenar en un futuro.
El gobierno dijo que la nueva ley admitiría a los trabajadores que requiere la industria alemana y evitaría con ello una escasez de mano de obra.
La ley también hace más estrictas las leyes de asilo y enumera los requerimientos que deben seguir los extranjeros para integrarse a la sociedad y la cultura alemanas.
Los conservadores sostienen que el plan del gobierno expondrá al país a una corriente inmigratoria que empeorará el elevado desempleo actual.