WASHINGTON.- La Casa Blanca consideró hoy que el líder palestino, Yasser Arafat, "no ha cumplido hasta el momento" las condiciones impuestas por Washington para que se celebre su reunión con el vicepresidente estadounidense, Dick Cheney.
Un portavoz de la Casa Blanca, Sean McCormack, precisó que el presidente de EE.UU., George W. Bush, ha dejado claro que esa reunión sólo podrá celebrarse cuando Arafat "haga lo que tiene que hacer" para poner fin a la violencia.
El Presidente estadounidense indicó ayer que la posible celebración de una entrevista entre su vicepresidente y el presidente de la Autoridad Nacional Palestina depende de las recomendaciones de su enviado especial para Oriente Próximo, Anthony Zinni.
"Una reunión podría producirse siempre y cuando Arafat cumpla lo que se supone que tiene que hacer", dijo Bush, en referencia a la exigencia de EEUU de que el líder palestino haga mayores esfuerzos para detener los atentados terroristas contra objetivos israelíes.
"El general Zinni está tratando de determinar si él (Arafat) va a hacer lo que se dijo que haría", añadió Bush, que viaja hoy a Perú desde Monterrey, México, donde asistió a la conferencia de la ONU sobre el desarrollo.
Pese al recrudecimiento de la espiral de violencia en la zona, donde hoy murieron cinco palestinos, los preparativos para una eventual entrevista entre Cheney y Arafat siguen adelante.
Zinni tiene previsto mantener una serie de contactos, mañana, domingo, en Oriente Medio a fin de crear el ambiente propicio para esa reunión, que se celebraría en Egipto.
Esas gestiones podrían dar fruto mañana, domingo, en la entrevista entre funcionarios de seguridad palestinos e israelíes.
El vicepresidente estadounidense ha regresado de una gira por varios países árabes, además de Israel y Turquía, donde trató de recabar su apoyo para una eventual intervención militar de EE.UU. contra Irak, en el marco de la campaña internacional contra el terrorismo que emprendió en Afganistán, el 7 de octubre de 2001.
Mientras tanto, en EE.UU. cincuenta y un senadores demócratas y republicanos firmaron una carta dirigida a Bush en la que le solicitaban que impida la reunión entre el vicepresidente y Arafat.
La senadora demócrata por California, Dianne Feinstein, promotora de esa iniciativa, dijo que mientras el líder de la ANP no demuestre su compromiso con el fin de la violencia, el vicepresidente debe reconsiderar su iniciativa de reunirse con él.
En la misiva, el grupo de senadores reconocían el derecho de Israel a adoptar las medidas apropiadas para garantizar su seguridad y, al mismo tiempo, expresaban su apoyo a las gestiones de Zinni para lograr un alto el fuego.
No obstante, señalaron que el enviado especial de EE.UU. a Oriente Medio debe dejar claro que Washington no alcanzará acuerdos con quienes no cumplan su compromiso con el proceso de paz.
El Departamento de Estado de EE.UU. indicó este fin de semana que los líderes palestinos deben actuar pronto para que termine la violencia y agregó que estaban llevando a cabo gestiones similares con las autoridades israelíes.
La Casa Blanca está ejerciendo fuertes presiones a las partes en conflicto para que busquen las formas de lograr un alto el fuego lo antes posible, según dijeron fuentes oficiales.