CRAWFORD, Estados Unidos.- Tras la exhortación pública que hiciera nuevamente el Presidente Bush para que Israel retire sus tropas de Cisjordania, el Primer Ministro Ariel Sharon habló por teléfono con el Mandatario norteamericano este sábado y le dijo que su país apresurará su ofensiva en los territorios autónomos, según un comunicado difundido por su oficina.
Una declaración de la oficina de Sharon, informó que el Premier le dijo a Bush que Israel "está conciente del deseo estadounidense de ver que la operación termine rápidamente".
Sharon explicó también que el ejército israelí está operando en condiciones difíciles en ciudades y pueblos de Cisjordania, donde "existen grandes cantidades de armas, explosivos y terroristas armados", dijo la nota de prensa.
La declaración dice además que Sharon subrayó que Israel está haciendo todos los esfuerzos posibles para evitar bajas civiles y que esa precaución está prolongando la operación.
La nota de prensa fue emitida apenas horas después de que Bush, quien recibió al Primer Ministro británico Tony Blair, repitiese su demanda de que Israel pusiese fin a la incursión y retirase las tropas "sin demora".
En declaraciones desde su rancho en Texas durante una conferencia de prensa conjunta con el Primer Ministro británico, Tony Blair, quien lo visita, Bush dijo que "nosotros acordamos que el liderazgo palestino debe ordenar un cese del fuego inmediato y efectivo y tomar medidas drásticas contra redes terroristas".
Además, Bush y Blair acordaron que Irak debe permitir el retorno al país de los inspectores de armas de la ONU, pero disimularon sus diferencias sobre el posible uso de la fuerza contra Irak en un esfuerzo por mostrar una imagen de unidad entre aliados tan cercanos.
La negativa de Israel a cumplir con el llamado hecho el jueves por Bush de una retirada de las áreas palestinas que ha ocupado en respuesta a una ola de atentados suicidas, impregnaba las conversaciones entre Bush y Blair en el rancho del mandatario estadounidense en Texas.
"Nosotros acordamos que el liderazgo palestino debe ordenar un cese del fuego inmediato y efectivo y tomar medidas drásticas contra redes terroristas", dijo Bush en conferencia de prensa.
"Y acordamos que Israel debe frenar las incursiones en áreas controladas por los palestinos y comenzar a retirarse sin demora de esas ciudades que ha ocupado recientemente", añadió.
"Creo que Israel prestará atención a las palabras del Presidente Bush y lo hará sabiendo que él habla como amigo de Israel", dijo el Premier inglés.
"La mayoría de la gente en Israel se dará cuenta que ellos no tienen dos mejores amigos en el mundo que Estados Unidos de América o Gran Bretaña. Y ambos comprendemos, también, la horrible naturaleza de los actos de terrorismo de los que han sido objeto", agregó el líder británico.
"Pero nosotros también estamos tratando de ayudar a encontrar una salida del actual punto muerto, de modo que podamos entrar en el proceso político donde algunos de esos temas subyacentes pueden ser resueltos de forma satisfactoria para el largo plazo", sentenció.
Bush también critica a Arafat
En su alocución, el Presidente norteamericano continuó con su arenga contra el Presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Yasser Arafat.
El secretario de Estado norteamericano Colin Powell viaja mañana domingo al Oriente Medio, en un intento de revivir las conversaciones de cese del fuego, y ha declinado decir si se reunirá con Arafat durante el viaje.
"El Presidente Arafat ha fallado en su liderazgo, y ha decepcionado a la gente. El tuvo oportunidad tras oportunidad de ser un líder, y no ha liderado, y estoy decepcionado", dijo Bush.
A renglón seguido, el Mandatario denunció al líder iraquí Saddam Hussein y dijo que estaba comprometido a un cambio de régimen en Irak.
"El (Saddam) le dijo al mundo que nos mostraría que él no desarrollaría armas de exterminio masivo, y todavía, más de una década después, ha rehusado hacerlo", dijo Bush.
"Y el Primer Ministro (Blair) y yo estamos de acuerdo en que él necesita demostrar que no están desarrollando armas de exterminio masivo", afirmó.
Blair, por su parte, dejó abierta la cuestión de cómo lidiar con el Presidente iraquí.
Tras la conferencia de prensa, Bush y Blair regresaron al rancho para otra sesión de conversaciones y una fiesta para cerca de 30 personas el sábado por la noche, con sus respectivas esposas, Laura y Cherie.