CIUDAD DEL VATICANO.- Los religiosos franciscanos de la Basílica de la Natividad de Belén han denunciado que el Ejército israelí, que mantiene asediado el templo, no permite la retirada del cadáver del palestino muerto durante el último intento de asalto.
Según informó hoy la agencia vaticana Fides, el cuerpo de Khaled Syam, de 23 años, se encuentra todavía en el interior del templo, ya que los israelíes no han permitido que sea entregado a sus familiares.
Los religiosos han señalado que el cadáver, que presenta ya signos de descomposición, supone un "riesgo sanitario" que agrava la ya delicada situación humanitaria en el interior de la Basílica.
Paralelamente, los mandos militares israelíes continúan negándose a proporcionar a los sitiados agua y comida, siempre según Fides.
El joven falleció cuando tropas especiales del Ejército israelí (YAMAM), apoyadas por fuego de artillería, intentaron ayer introducirse en el templo, en el que se encuentran atrincherados cerca de doscientos milicianos palestinos, según denunció la Curia General de los Franciscanos en Roma.
Un portavoz de la orden religiosa explicó que el palestino intentaba apagar un incendio provocado por el ataque cuando fue alcanzado por disparos de francotiradores.
En el incendio resultó destruida una vidriera de la Basílica y un valioso mosaico en la zona del templo a cargo de los armenios.
La agencia vaticana señaló hoy la posible presencia de miembros del YAMAM en el dédalo de subterráneos existentes bajo el templo, al tiempo que advirtió que el Ejército de Israel continúa presionando para lograr la rendición incondicional de los milicianos palestinos, que han recibido órdenes de Yasser Arafat de no deponer las armas.
En este delicado contexto el franciscano David Jaeger, portavoz de la Custodia de Tierra Santa (responsable del templo de Belén), aseguró que "el único rayo de esperanza" para los religiosos asediados es el llamamiento del Papa y la acción mediadora de la Santa Sede.
A su vez, Israel, "simultáneamente" con lo que haga el Gobierno palestino, según el documento de Zinni, tendrá que replegarse de los territorios palestinos ocupados, que estaban bajo control de la ANP.
El Presidente Arafat dijo ayer lunes al enviado de la Unión Europea (UE), Miguel Angel Moratinos, que habló con él por teléfono, que está dispuesto a "trabajar de un modo constructivo" con Powell, aunque muchos observadores se preguntan cómo podrá desarmar a las facciones de la resistencia si sus organismos de seguridad, con unos 30.000 efectivos, están fuera de acción, según el ministro Erekat.
"La invasión israelí -dijo Erekat a la prensa- puso fin a la ANP, y al proceso de Oslo", que comenzó con los históricos acuerdos negociados en 1993 en esa ciudad, y que enmarcaban las negociaciones de paz entre los dos pueblos, interrumpidas desde hace quince meses.
