GINEBRA.- La Comisión de Derechos Humanos de la ONU debe votar mañana un proyecto de resolución sobre Cuba, el primero de inspiración latinoamericana, que reclama avances en el respeto de los derechos civiles y políticos similares a los que se le reconocen al régimen de Fidel Castro en materia social.
El texto, que sus patrocinadores califican de "constructivo" y "equilibrado" y Cuba tacha de "discriminatorio", solicita a la Alta Comisaria de la ONU, Mary Robinson, el envío de "un representante personal para que su Oficina coopere con el Gobierno de Cuba en la aplicación" de la resolución.
La propuesta de resolución, presentada por Uruguay y que será votada el viernes, está apoyada por una treintena de países, según fuentes diplomáticas latinoamericanas, que dijeron no poder ser más precisos porque las decisiones adoptadas en algunas capitales aún no han sido formalizadas aquí en Ginebra.
Entre los países que figuran como patrocinadores están los latinoamericanos Argentina, Perú, Guatemala, Panamá, Costa Rica, Nicaragua, Honduras y El Salvador, además de EE.UU., Canadá, Australia, Eslovenia, Polonia, Bulgaria, Letonia, Finlandia, Suecia, Dinamarca, Holanda, Alemania y Reino Unido.
Entre los países que han declarado su intención de votar a favor del texto figuran, además de los latinoamericanos con alguna excepción como la de Brasil, los nueve países de la Unión Europea que integran la Comisión.
Fuentes diplomáticas europeas señalaron que su decisión de respaldar la propuesta obedece a que es una "iniciativa conjunta latinoamericana" y al "carácter equilibrado" del texto.
Varios jefes de Estados latinoamericanos ya han expresado en los últimos días su apoyo a esa iniciativa, que este año no podrá votar EE.UU. por su condición de país observador.
Así el Presidente mexicano, Vicente Fox, consideró que "no se trata de una condena a Cuba", sino de "una propuesta positiva a favor de los derechos humanos y una mención sobre el asunto del bloqueo, condenándolo".
También el Presidente del Perú, Alejandro Toledo, alabó la iniciativa y subrayó, aludiendo a las críticas de Cuba de que el texto está inspirado por EE.UU., que su país "no recibe ni acepta presiones de nadie. Presentamos el texto como un deseo de apoyo a Cuba y porque tenemos la autoridad moral para hacerlo".
Asimismo, el Presidente de Costa Rica, Miguel Angel Rodríguez, manifestó que su país ha defendido de manera permanente los derechos humanos y que éste es uno de los motivos por los que respalda el proyecto de resolución sobre Cuba.
En cambio, el ministro cubano de Relaciones Exteriores, Felipe Pérez Roque, criticó que se trata de una "nueva maniobra de Estados Unidos a la que se han prestado los gobiernos de Uruguay, Perú y otros países" y dijo que "los países de América Latina no harían esto si no estuvieran bajo la presión brutal de Washington".
El borrador de resolución "alienta al Gobierno de Cuba a adherirse al pacto de Derechos Civiles y Políticos y al Pacto de Derechos económicos, Sociales y Culturales".
Asimismo solicita a Mary Robinson a que disponga el envío de un representante personal para que su Oficina coopere con el Gobierno de Cuba en la aplicación de esta resolución y exhorta a La Habana a "tomar las medidas necesarias para la efectiva realización de la visita tan pronto como sea posible".
Finalmente, el texto señala que la cuestión de los derechos humanos en Cuba volverá a examinarse en el próximo período de sesiones, cuando ese representante personal de la Alta Comisaria presente su informe sobre la aplicación de la actual resolución.