PARÍS.- La incertidumbre planea hoy en la primera vuelta de las elecciones presidenciales, en las que unos 40 millones de franceses están llamados a elegir entre un récord de 16 candidatos a los dos que disputarán el duelo final del 5 de mayo.
Tras una campaña que no consiguió movilizar al electorado, el "suspenso" es total, en vista de la abstención récord y la fuerza del voto de protesta auguradas por los sondeos, que desde la medianoche del pasado viernes no pueden publicarse, por ley.
No se excluyen sorpresas en este asalto, en el que el actual Presidente, el neogaullista Jacques Chirac, y el candidato socialista y primer ministro saliente, Lionel Jospin, cruzan los dedos para quedar en cabeza y protagonizar así la segunda y definitiva vuelta, que dirá quién presidirá Francia en los próximos cinco años.
Chirac y Jospin, de 69 y 64 años, respectivamente, que cohabitan en el poder desde 1997, han visto con inquietud cómo, en los últimos sondeos, apenas arañaban cada uno un 20% de intenciones de voto, con sus respectivos lemas de "Francia en grande" y "presidir de otro modo".
Los 64.000 colegios electorales abrieron a las 08:00 horas (06:00 GMT) en la Francia metropolitana y cerrarán a las 18.00 horas (16:00 GMT), salvo en las grandes ciudades, donde permanecerán abiertos dos horas más.
A las 12:00 horas (10:00 GMT), la participación era del 21,41% (frente a un 22,52% a esa misma hora en 1995), anunció el Ministerio del Interior.
Casi todos los candidatos han votado en sus feudos electorales. Jospin lo hizo en torno a las 11:00 horas en Cintegabelle (suroeste) antes de volver a París, y Chirac en Sarran (centro), donde su esposa Bernadette, que le acompañaba, es concejal.
A partir de las 20:00 horas (18:00 GMT), las cadenas de televisión anunciarán sus proyecciones de resultados a partir de los primeros recuentos de votos en 200 colegios electorales-test que hayan cerrado una o dos horas antes.
Debido al récord de candidatos -cuatro más que el anterior de 1974 y siete más que en las elecciones de 1995- y al probable estrecho margen entre los aspirantes, las primeras estimaciones no necesariamente acertarán el resultado final.
Los verdaderos ganadores podrían ser la abstención, de hasta un 30% (el récord anterior en una primera vuelta fue el 22,4% en 1969), y el voto contestatario.
Los dos candidatos de ultraderecha y los tres de extrema izquierda aglutinaban en los últimos sondeos publicados el 25-28% de las intenciones de voto, frente a un 21% en 1995.
Estos factores -la abstención (hay vacaciones escolares en parte de Francia y hace buen tiempo hoy en casi todo el país), el voto de protesta y la atomización del electorado-, pueden crear grandes sorpresas, dicen los analistas, que, además de tener la vista puesta en la segunda vuelta del 5 de mayo, también buscan pistas sobre las Legislativas de junio próximo.
El ultraderechista Jean-Marie Le Pen, del Frente Nacional, que a los 73 años libra su cuarta lid por el Elíseo, podría ocupar hoy el tercer puesto, detrás de Chirac y Jospin, a menos que, en un auténtico seísmo político, se clasificara para la segunda vuelta.
Favorecido por el énfasis en la inseguridad que dominó la campaña y confiado en que el otro aspirante ultraderechista, su ex aliado Bruno Mégret, no le restara apoyos, Le Pen moderó el tono, no el contenido, de su mensaje contra la inmigración y por la recuperación de la soberanía "confiscada" por Europa y la globalización.
El resultado de la trotskistas Arlette Laguiller, que a los 62 años y en su quinta campaña presidencial podría superar con creces el 5,3% que obtuvo en 1995, puede agravar la crisis del Partido Comunista, cuyo abanderado es Robert Hue.
El trotskista y benjamín de la tropa, con 27 años, Olivier Besancenot, cartero de profesión, ronda un 3% en los sondeos. El tercer trotskista en liza es Daniel Gluckstein.
Será también interesante ver el resultado del "republicano" y ex ministro del Interior de Jospin, Jean-Pierre Chevenement, quien como "hombre de la Nación" barre a izquierda y derecha; y los del centroliberal Francois Bayrou y del liberal Alain Madelin para saber si hay un espacio en la derecha fuera de los "chiraquianos".
Hay dos candidatos con la etiqueta ecologista: el Verde Noel Mamere y la ex ministra neogaullista Corinne Lepage.
Cierran la ronda de candidatos el defensor de la caza Jean Saint-Josse; la católica conservadora Christine Boutin; y la primera aspirante negra al Elíseo y candidata de los Radicales de Izquierdas, Christiane Taubira.
A causa de la diferencia de hora, los más de 136.000 votantes inscritos en Nueva Caledonia y en el minúsculo territorio de Wallis y Futuna (en el Pacífico), fueron los primeros en votar, y la participación no llegó al 20% en las primeras horas.