PARIS.- El 17,5 por ciento de los electores franceses prefirió el programa del líder de la extrema derecha francesa, Jean-Marie Le Pen, a los programas del Premier socialista Lionel Jospin o el Presidente Jacques Chirac, por considerarlo más simple, actual y "francés" en un panorama político que se percibe muy gris.
Los siguientes son los puntos principales del programa de Le Pen, que desafiará a Chirac en el segundo turno de las presidenciales el 5 de mayo próximo.
-Inmigración: el caballito de batalla de la campaña electoral de Le Pen fue el discurso sobre "inmigración-invasión" y la consecuente ecuación "inmigración-delincuencia-inseguridad".
En definitiva, Le Pen propone -alimentando sugestiones xenófobas y racistas- devolver a los inmigrantes a sus casas, partiendo de la "constatación de que las razas tienen diversos desarrollos culturales y algunas son inferiores a otras".
Los atentados terroristas del 11 de septiembre dieron nuevo impulso a otro tema querido para Le Pen: el miedo al Islam. "El Islam -sostiene desde siempre- es un riesgo para nuestra nación".
-Criminalidad: la campaña del líder del Frente Nacional fue también una campaña electoral contra la criminalidad. Definida como "infame" por la izquierda, la batalla de Le Pen contra el crimen alcanzó el punto más fuerte en el pedido de restablecer la pena capital, considerada como único remedio frente a un aumento de la delincuencia que "deshonra a Francia".
-Política exterior: con una clara actitud antieuropea Le Pen pide la supresión de la Comisión Europea y al mismo tiempo la abolición de los Tratados de Maastricht, de Schengen y de Amsterdam.
Hostil a la introducción del euro en Francia, el líder de la extrema derecha está a favor de la reintroducción del franco y su "cohabitación" con la moneda única.
"No queremos esta Europa de los capitales, queremos la Europa de las naciones", afirma.
-Trabajo: el objetivo declarado en materia de empleo es la derogación de la ley sobre la reducción del horario de trabajo semanal introducida por Lionel Jospin, conocida como las "35 horas". Le Pen apunta también a la revalorización de los salarios mínimos.
-Social: Le Pen lucha por una política de protección social y reivindica la legitimidad de las asignaciones familiares sólo para los ciudadanos franceses. Otro objetivo es la creación de un régimen jubilatorio nacional que prevé trato igual para el sector público y el privado.
Le Pen es contrario al aborto, considerado como "una forma de genocidio popular", además durante toda la campaña electoral repitió que las mujeres tienen una "misión fundamental: transmitir la vida y educar a los hijos".