MÉXICO.- Las relaciones entre México y Cuba podrían romperse, según reconoció hoy el Presidente cubano, Fidel Castro, tras divulgar la grabación de una conversación telefónica privada con su homólogo mexicano, Vicente Fox, y acusarle de provocar su retirada de la Cumbre de Monterrey del pasado marzo.
Castro, que divulgó la conversación en un encuentro con la prensa en La Habana, reconoció que la difusión de la conversación podría poner en riesgo las relaciones con México, que en mayo cumplirían su primer centenario.
El gobierno mexicano todavía no se ha pronunciado sobre este nuevo golpe a las ya debilitadas relaciones bilaterales, aunque fuentes oficiales confirmaron a EFE que tanto los asesores de Fox en la Presidencia de la República como los colaboradores del canciller, Jorge Castañeda, se encuentran reunidos para analizar la situación.
México, hasta ahora uno de los principales aliados de Cuba en foros internacionales -sólo superado por la Venezuela de Hugo Chávez-, rompió la pasada semana su tradicional política de apoyo a la isla y votó a favor de una resolución contra el régimen de Castro en la Comisión de Derechos Humanos de Naciones Unidas, en Ginebra.
La decisión del Gobierno de Fox, que fue duramente criticada por la izquierda mexicana, se produjo después de la polémica desatada por las acusaciones de Cuba contra Castañeda.
El diario Granma acusó al canciller de forzar la retirada de Castro de la Cumbre sobre Financiación al Desarrollo organizada por las Naciones Unidas en Monterrey, entre los pasados 18 y 22 de marzo, siguiendo instrucciones de Estados Unidos.
Sin embargo, los problemas diplomáticos entre ambos países comenzaron mucho antes.
En abril del pasado año, el canciller cubano acusó a Castañeda de animar a los países latinoamericanos a apoyar una resolución de condena contra Cuba en la Comisión de Derechos Humanos de la ONU.
El canciller mexicano atribuyó las declaraciones a que los cubanos se encontraban "ardidos y molestos", y el gobierno de Fox matizó las declaraciones del ministro para calmar los ánimos.
Este año, la sucesión de incidentes registrados desde el pasado febrero tensaron las relaciones bilaterales hasta el límite:
- 4 de febrero: Fox concluyó una rápida visita a la isla, que tenía el objetivo de relanzar las relaciones bilaterales, con una reunión con un grupo de disidentes cubanos.
- 27 de febrero: unas declaraciones de Castañeda en Miami, supuestamente manipuladas por Radio Martí, terminaron con la invasión por parte de una veintena de cubanos a la embajada de México en la Habana en busca de asilo.
- 1 de marzo: fuerzas especiales cubanas desalojaron la sede diplomática supuestamente a petición del gobierno de México.
- 21 de marzo: tras un breve discurso en la tribuna de la Conferencia sobre Financiación al Desarrollo de Monterrey, Castro anunció que debía abandonar la reunión por "una situación especial originada por su presencia" en este foro.
Ese mismo día, Castañeda rechazó cualquier relación de Estados Unidos con la retirada de Castro.
- 22 de marzo: el presidente de la Asamblea Popular cubana, Ricardo Alarcón, denunció que el gobierno de México pidió a Castro que se retirara para evitar un encuentro con el presidente de EE.UU., George Bush.
Horas después, el presidente Fox negó, en un encuentro con la prensa, la versión cubana.
- 26 de marzo: el diario "Granma", órgano oficial del Partido Comunista cubano, acusa a Castañeda de ser el "arquitecto" del conflicto y seguir instrucciones de Estados Unidos.
México rehúsa dar una respuesta oficial a las acusaciones a menos que se presenten por los cauces oficiales.
- 15 de abril: el gobierno mexicano anuncia que, por primera vez en la historia, votará a favor de la resolución presentada por Uruguay en la que se denuncia la situación de los derechos humanos en Cuba y recomienda el envío de un relator del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos a la isla.
Fuentes oficiales aseguran que informaron de esta decisión al gobierno cubano por "los cauces pertinentes" e insisten en que el voto no es contra el país sino en defensa de los derechos humanos de los cubanos.