BOGOTA.- Un francés, dos canadienses y un ecuatoriano que viajaban el pasado 19 de abril entre Colombia y Ecuador a bordo de un helicóptero, fueron secuestrados por la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), informó este jueves en Bogotá el general Fernando Tapias, comandante de las Fuerzas Militares.
Tapias señaló que la aeronave y sus ocupantes, cuyas identidades no precisó de inmediato, fueron plagiados luego de realizar un aterrizaje forzoso de emergencia en una zona rural del suroeste del país.
"Por inteligencia técnica y de comunicaciones sabemos que el helicóptero tuvo que aterrizar de emergencia, y que fue secuestrado por las FARC, tanto los tripulantes como el aparato. Eso es lo que único que conocemos por medio de la inteligencia técnica", declaró Tapias a los periodistas.
El aparato, tipo Bell-212 de fabricación estadounidense, al servicio de la empresa Heliamérica, desapareció en la tarde del 19 de abril cuando sobrevolaba una zona montañosa al sur de Colombia próxima a la frontera con Ecuador.
Carmen Torres, una ciudadana chilena casada con Guilles Pregent (50 años), quien pilotaba la aeronave, dijo el pasado lunes a la AFP que en ésta viajaban, además de su esposo, de nacionalidad canadiense, el francés Pierre Gallipon, de 46 años y representante de la firma Heliamérica en la ciudad boliviana de Santa Cruz, y Jay Rideni, un técnico de 26 años también canadiense.
La mujer no mencionó en esa ocasión al ciudadano ecuatoriano.
Según Torres, el helicóptero, que se dirigía de Canadá a Bolivia, hizo una escala técnica en la ciudad colombiana de Cali (470 kilómetros al suroeste de Bogotá) y desde allí su esposo dialogó con ella y le dijo que todo estaba bien.
Reveló que poco después de salir de Cali con destino a Esmeraldas (Ecuador), donde deberían reabastecerse de combustible, los ocupantes de la aeronave se comunicaron con su base en Calgary (Canadá), a través de sus celulares y del equipo satelital del helicóptero, para informar que la tripulación de un pequeño avión que tenían a la vista, del que desconocían si era militar o civil, les indicó que estaban en "situación irregular" y que debían dirigirse de inmediato a la ciudad ecuatoriana de Manta.
A partir de ese momento, afirmó Torres, se perdió todo rastro de la aeronave, que, según dijo, había sido comprada por una empresa boliviana con sede en Santa Cruz.
El comandante Patricio Zabala, jefe de una base militar antidrogas destacada en Manta, dijo la víspera que la nave nunca ingresó a Ecuador.
Un vocero de la Aeronáutica Civil colombiana dijo el martes último a la AFP que lo único que se sabía era que el helicóptero había partido de Cali y que dos horas después se comunicó con la torre de control para informar que sobrevolaba la población de Mercaderes, en el sur, en una zona denominada 'roja' por la fuerte presencia de los rebeldes izquierdistas.
Asimismo, indicó que las comunicaciones se interrumpieron y que desde el sábado siguiente se han hecho varios vuelos de reconocimiento, especialmente sobre el área de Mercaderes, para tratar de dar con el paradero del aparato, pero que los resultados "han sido infructuosos".
