CARACAS.— En un paso destinado a permitir la reorganización del gobierno del presidente venezolano Hugo Chávez luego de un fallido intento golpista en su contra, los 14 ministros del gabinete presentaron sus renuncias, confirmó el canciller Luis Alfonso Dávila.
Ante las crecientes especulaciones, Dávila comentó el viernes que el Presidente Chávez proyectaba hacer algunos cambios dentro de su equipo, pero no indicó cuándo concretaría sus planes.
"Todos los ministros hemos puestos nuestros cargos a la orden desde hace tiempo ya, estamos a la espera", dijo el canciller a su salida de un consejo de ministros que se realizó en el palacio presidencial de Miraflores, en una entrevista divulgada por la cadena de noticias Unión Radio.
Al ser consultado si los ministros presentaron su renuncia después del 11 de abril, Dávila contestó que "sí, por supuesto".
El 11 de abril murieron 17 personas y cientos fueron heridas en una sangrienta manifestación en las cercanías del palacio de gobierno que fue el detonante de la transitoria salida de Chávez del poder, al cual fue restituido 48 horas después en medio de demandas callejeras y sublevaciones de militares de los aliados del jefe de estado.
José Vicente Rangel, actual ministro de Defensa y quien ha sido ministro del Exterior de Chávez, es hasta ahora el único de los miembros del gabinete que públicamente se conoce que tiene asegurada su permanencia en el equipo de gobierno.
El 28 de abril en su programa semanal de radio "Aló Presidente", Chávez designó a Rangel como su próximo vicepresidente, reemplazando a Diosdado Cabello, quien podría ocupar otro cargo dentro del gabinete, comentó el presidente.
Dávila, por su parte, aseguró que desconoce cuál será su destino político dentro del gobierno. "No hemos todavía recibido información al respecto, le corresponde al presidente tomar esa decisión en el momento en que él lo estime necesario", añadió.
El anuncio coincide con las demandas de grupos opositores que han pedido al gobierno gestos tales como una reorganización del gabinete ministerial como muestra de la voluntad de rectificación de Chávez con miras a aliviar el clima de confrontación que vive el país desde hace meses y que se agudizó con el fallido golpe de estado del 11 de abril.
Desde el 14 de abril, pocas horas después de su regresó al poder, Chávez ha hecho un llamado por la paz y la reconciliación, marcando un agudo contraste son su estilo anterior de atacar verbalmente a adversarios políticos, empresarios, sindicalistas e incluso a periodistas y miembros del clero.
"Yo si estoy dispuesto a rectificar...pero pido ayuda’’, dijo Chávez.