AMMAN.- La conferencia internacional de paz sobre Medio Oriente comienza a tomar forma y podría comenzar por una reunión a nivel ministerial a principios de julio, indicaron a la AFP responsables árabes.
"La conferencia no será necesariamente un foro que se reunirá una sola vez, sino más bien consistirá en una serie de reuniones que comenzarán a nivel ministerial, y que luego continuarán a un nivel más elevado", estimó uno de estos responsables.
Para los árabes, la conferencia de paz debe delimitar de manera precisa su objetivo final, a saber el establecimiento de un Estado palestino, la solución del tema de las fronteras, de los refugiados palestinos, de Jerusalén, y deberá presentar un calendario para la realización de estos objetivos, indicó este responsable, que pidió el anonimato.
Según esta fuente, las discusiones comenzarán teniendo en cuenta las resoluciones 242, 338 y 1.397 de la ONU, la conferencia de Madrid en 1991 y la iniciativa saudita de paz, adoptada por la cumbre árabe de fines de marzo pasado en Beirut.
"Además se presentará un calendario bien preciso para la realización de estos objetivos, que podría variar entre dos y tres años", indicó.
"El objetivo no es ir a una conferencia para negociar los términos de referencia base, sino más bien para ejecutar estas referencias ya establecidas", declaró a la AFP otro responsable árabe. Los puntos de vista difieren del lado árabe y del lado israelí.
Para los israelíes, se trata de ’’puntos de una etapa’’ hacia un objetivo que tomará forma con el tiempo y que no estará delimitado con anticipación.
Para los árabes, por el contrario, las etapas deberán llevarlos hacia un destino conocido de antemano. Sobre esto, habrían obtenido un respaldo estadonunidense.
"Poco importa la cantidad de puntos de la etapa, o la velocidad con que sean alcanzados, lo importante es llegar al objetivo que se anunció en un principio", indicó el responsable árabe.
"Está fuera de discusión que los árabes acepten soluciones interinas, como en el pasado. Este término ’interino’ será dejado de lado durante la conferencia", agregó.
El objetivo es un "acuerdo final, de una vez por todas, al conflicto árabe-israelí, que permitirá a los árabes la recuperación de las tierras ocupadas a cambio de la seguridad y la paz para Israel", indicó el responsable.
Desde un principio, los países árabes realizaron gestos de buena voluntad. Los presidentes egipcio, Hosni Mubarak y sirio, Bashar Al Assad, y el príncipe heredero saudita Abadalá ben Abdel Aziz afirmaron durante una cumbre tripartita el 11 de mayo en Charm el Cheij (Egipto) su "rechazo a la violencia bajo todas sus formas".
"Los árabes están conscientes de que la Intifada es un medio y no un fin en sí mismo y ya no debe continuar si se está negociando", indicó otro responsable árabe.
Por su lado, el presidente palestino Yasser Arafat cedió a las cada vez más fuertes presiones extranjeras y prometió reformas de la Autoridad Palestina, lo que alegró a Washington.
Estados Unidos, la Unión Europea, Rusia y la ONU, que habían lanzado el 2 de mayo en Washington la idea de una conferencia, participarán en la conferencia internacional y en las reuniones que la precederán, precisaron los responsables.
El lugar en donde se realizará no fue definido aún, pero "la elección parece inclinarse hacia Turquía, un país musulmán que tiene buenas relaciones tanto con los árabes como con Israel", afirmó otro responsable árabe.