WSHINGTON.- Estados Unidos, que ha acusado a Cuba de poner en marcha un programa de armas biológicas, pidió hoy al Gobierno de La Habana que abra sus laboratorios a la comunidad internacional.
El portavoz del Departamento de Estado, Richard Boucher, dijo que el régimen castrista puede demostrar que cumple los preceptos de la Convención sobre Armas Biológicas (BAC) "abriendo los laboratorios y permitiendo intercambios normales con otros científicos".
Boucher explicó que con esta petición no sugiere inspecciones por parte de expertos internacionales, porque, según subrayó, este tipo de operaciones permiten a los países implicados preparar y maquillar las visitas para ocultar sus arsenales.
EE.UU. se opone a regular internacionalmente las inspecciones y el pasado mes de julio se negó a firmar un protocolo para reforzar la BAC, que data de 1972, porque obliga a los países signatarios a abrir los lugares donde podrían estar elaborando armas biológicas.
Según Washington, esto hubiera permitido a los países que no cumplen con la Convención esconder sus armas y hubiera abierto las puertas al espionaje industrial de las compañías estadounidenses.
El pasado 6 de mayo, el secretario adjunto de Estado, John Bolton, manifestó que Cuba "ha realizado un esfuerzo para desarrollar y dotarse de un limitado armamento biológico ofensivo", acusación que fue negada tajantemente por el Gobierno de La Habana.
La acusación fue reiterada por el secretario de Estado, Colin Powell, y por fuentes de la Casa Blanca, que anunciaron un endurecimiento de la política hacia Cuba para forzar al régimen de Fidel Castro a adoptar medidas democratizadoras.
El alcance de ese endurecimiento será explicado el próximo lunes por el presidente George W. Bush en un discurso que pronunciará en Florida en el marco de la campaña electoral de su hermano, Jeb Bush, para ser reelegido gobernador de ese estado.