CIUDAD DEL VATICANO.- El papa Juan Pablo II recibió hoy en audiencia en el Vaticano al Presidente de Brasil, Fernando Henrique Cardoso, con quien habló a solas durante 20 minutos y a quien dijo que él también se siente un "gaucho".
"Yo también me siento un gaucho", dijo el Pontífice al mandatario brasileño, quien le respondió: "Santidad, usted no sólo es un gaucho, también es un carioca y un brasileño", y destacó así el amor que el Papa tiene por el país con más católicos del mundo.
La audiencia se celebró en una sala anexa al Aula Pablo VI, donde el Pontífice se reunió inmediatamente después con varios miles de peregrinos, en su gran mayoría brasileños y españoles, que ayer asistieron en la plaza de San Pedro del Vaticano a la canonización de Paulina del Corazón Agonizante de Jesús -que es la primera santa de Brasil- y el español Alonso de Orozco.
Se eligió esa sala y no la tradicional biblioteca privada del palacio apostólico para facilitar los desplazamientos del Papa, al que le cuesta caminar debido a la artrosis que padece en la rodilla derecha.
Juan Pablo II presentaba buen aspecto, sonrió en numerosas ocasiones, habló en español y se le entendió perfectamente lo que decía.
Cardoso llegó acompañado de su esposa, Ruth, y su nieto Pedro, de 8 años, a quien el Papa acarició en numerosas ocasiones la cabeza.
También formaron parte del séquito los gobernadores del estado de Sao Paulo, Gerado Akmin, y de Santa Catalina, Esperidiao Amin; y la alcaldesa de Florianópolis, Angela Amin, esposa del gobernador de Santa Catalina.
La madre Paulina del Corazón Agonizante de Jesús -cuyo nombre de pila fue Amabile Lucia Visintainer, nacida en 1875 en Italia y fallecida en 1942 en Brasil- fue beatificada en 1991 por Juan Pablo II en Florianópolis.
El presidente Cardoso regaló al Papa una estatua de la nueva santa y un crucifijo de plata. El Pontífice le donó las tradicionales medallas de su pontificado.
Esta es la tercer vez que el Papa recibe a Cardoso en el Vaticano, tras las audiencias de 1999 y 1997.
El presidente brasileño se entrevistó posteriormente con el cardenal secretario de estado vaticano, Angelo Sodano.
El Papa saludó a los peregrinos brasileños venidos a la canonización, a los que dijo en portugués que la nueva santa es un ejemplo a seguir, y destacó que la madre Paulina tomó la opción por los pobres y los enfermos y se dedicó a ellos con sencillez, humildad y vida interior.