LONDRES.— Cinco siglos después de que Arturo, el poco conocido hermano del rey Enrique VIII, muriera por una "misteriosa fiebre", los arqueólogos creen haber encontrado su tumba, y quizás indicios de la verdadera causa de su muerte, en 1502, cuando tenía 15 años.
Los expertos, que utilizaron dispositivos con radar, dicen que localizaron la tumba del primer príncipe de Gales, del clan Tudor, bajo un piso de piedra caliza en la Catedral de Worcester.
"Nadie había pensado mucho en Arturo, hasta ahora. Creemos haber identificado su tumba", dijo Christopher Guy, arqueólogo de la catedral
Guy dijo que el radar reveló una tumba dentro de una capilla construida dos años después de la muerte del príncipe. Las pruebas han mostrado que se usó tierra y escombros para rellenar la fosa, pero no restos humanos, por lo que "el próximo paso es usar un endoscopio en el interior de la tumba", agregó.
"Eso podría proporcionar detalles sobre la forma de su muerte", dijo Guy.
Nacido en 1486, el príncipe Arturo fue el primer hijo del rey Enrique VII y de Isabel de York.
