JJERUSALEN.- Los carros de combate israelíes rodean la Basílica de la Natividad de Belén, cuyo acceso ha quedado bloqueado, ’’para impedir que milicianos palestinos se refugien en su interior’’, informaron hoy oficiales militares de Israel.
El fraile franciscano Ibrahim Faltas, de nacionalidad egipcia, y que ayudó a evacuar enfermos, cadáveres y finalmente a los milicianos palestinos durante el último cerco israelí a la Basílica, declaró a EFE que los tanques comenzaron a rodear el santuario cristiano a las 04.00 hora local (02.00 GMT).
Faltas señaló que la Basílica ha sido cerrada por los frailes franciscanos y los monjes armenios y greco-ortodoxos, al igual que los conventos y el resto de las dependencias que conforman el complejo religioso.
"La ciudad de Belén está desierta, los soldados instan a la población mediante altavoces a que permanezcan en sus casas, a que nadie se mueva, y se ha declarado el toque de queda. Desde el convento veo las calles vacías", dijo.
Tropas, todoterrenos y vehículos blindados israelíes penetraron esta madrugada en Belén, por segunda vez en dos días, en busca de supuestos activistas palestinos.
Fuentes diplomáticas occidentales explicaron a EFE que el nuevo cerco al santuario cristiano, que semeja más una fortaleza que un templo, responde a que el Ejército de Israel no quiere caer en el mismo error estratégico que cometió el pasado 2 de abril, cuando circundaron Belén y al avanzar hacia el centro empujaron a los palestinos a refugiarse en el recinto religioso.
En esta ocasión han decidido cercar directamente la Basílica y realizar las detenciones en la ciudad, en el campo de refugiados de Deheisheh y en la localidad de Beit Jala, sin temor a que los palestinos busquen asilo en los edificios más recios, dijeron.
Un grupo de peregrinos italianos, encabezados por un obispo franciscano, se ha visto obligado a cancelar su estancia en la hospedería franciscana ’’Casa Nova’’, situada en el interior del complejo religioso, que querían visitar para valorar los daños del último asedio israelí que finalizó el pasado 10 de mayo.
En la ciudad bíblica, soldados israelíes penetraron hoy en el edificio sede de la emisora de radio Belén 2000 e interrumpieron la transmisión, informaron fuentes palestinas.
La misma táctica de rodear los edificios que son un referente para la población siguieron los soldados israelíes en el campo de refugiados de Deheisheh, de Belén, al cercar el Hospital Psiquiátrico para evitar que los palestinos busquen allí refugio y se hagan fuertes.
Al menos 16 hombres han sido detenidos en dicho campo, entre ellos un supuesto líder de las Brigadas de los Mártires de Al-Aksa, Ahmed Al Mugrabi, considerado por Israel un "activista terrorista de muy alto grado", y su hermano, Alí Al Mugrabi.
Los hermanos Al Mugrabi fueron detenidos junto a la hermana de una mujer suicida que atentó en el barrio Kiriat Yovel, de Jerusalén, a la entrada de un supermercado, el pasado 29 de marzo, y junto a Mahmud Sarjana.
A Ahmed Al Mugrabi y a Mahmud Sarjana, los israelíes les adjudican la responsabilidad de la muerte de al menos 13 ciudadanos al enviar suicidas palestinos a Israel.
En la localidad de Beit Jala, las fuerzas israelíes han cercado el hospital de Al Hussein, con el mismo propósito.
Por otro lado, las tropas israelíes continúan las detenciones en la ciudad cisjordana de Kalkilia, donde penetraron ayer, domingo, "para evitar la salida de terroristas del lugar", informó el Ejército.
Las Fuerzas Armadas salieron de Tulkarem, donde permanecieron dos días, pero mantienen la ciudad cercada y "operan" en las aldeas cercanas de Zaida y Al Bad, agregaron fuentes militares israelíes. cm-bd
Por otro lado, un joven palestino de 17 años resultó muerto esta noche por un proyectil lanzado por un tanque del Ejército de Israel cerca de la localidad de Khan Yunis, en la franja de Gaza.
El asesor del presidente palestino, Nabil Abú Rudaina, declaró hoy a EFE que "con las invasiones militares en territorios palestinos, Israel destruye todos los esfuerzos internacionales para construir la paz y la seguridad en la región".
Para Rudaina, "el Gobierno de Israel, que reclama ser el único Estado democrático en Oriente Medio, impide a los palestinos practicar sus propios derechos democráticos, pues dificulta la organización de las elecciones con sus continuas incursiones y asesinatos en el interior de los territorios palestinos".
La última invasión israelí contra ciudades, aldeas y campos de refugiados cisjordanos comenzó el pasado 29 de marzo con la toma de Ramala y se dio por finalizada el 10 de mayo con la liberación de la Basílica de la Natividad de Belén, en cuyo exterior se han apostado nuevamente hoy las tropas de Israel.
