BUENOS AIRES.- Luego de un arduo debate de más de siete horas, los senadores del oficialismo peronista respaldaron en la noche del jueves al Presidente Eduardo Duhalde y derogaron la ley de "subversión económica" exigida por el Fondo Monetario Internacional para brindar asistencia financiera.
Con un empate de 34-34, los legisladores justicialistas consiguieron derogar la polémica ley que data de los años 70. El presidente provisional del Senado, Juan Carlos Maqueda, del gobiernista partido justicialista (peronista) desempató la votación en favor de la derogación, a través de su doble voto.
El FMI condicionó la asistencia a esa derogación, a reformas a la ley de quiebras y a la drástica reducción del déficit fiscal de todas las provincias. Hasta ahora solamente ocho de un total de 24 provincias ratificaron esa reducción.
El Fondo suspendió su programa con la Argentina en diciembre pasado, luego de reiterados incumplimientos de las metas pactadas y cuando el país declaró que no pagaría su deuda pública externa de 141.000 millones de dólares.
La ley de subversión económica, que data de 1974, castiga maniobras culposas o dolosas que se realicen en perjuicio de la economía nacional o del patrimonio de empresas. Según el FMI y sectores patronales, desalienta las inversiones extranjeras y es "discriminatoria".
Los legisladores que se oponen a su derogación sostienen que sin la norma quedarían en libertad algunos acusados y se daría impunidad de los llamados "delitos de guante blanco", especialmente en los medios financieros y bancarios.
Mientras el Senado debatía, la cotización del dólar aumentaba y Duhalde criticaba a la Unión Cívica Radical (UCR), que anteriormente había firmado un acuerdo que incluía su compromiso de apoyar a la derogación de la ley.
"Parece que están arrepentidos", dijo Duhalde en declaraciones a una radioemisora local.
"Si no se deroga hoy, no se deroga nunca porque ya no hay alternativa. "No es cuestión de días, si no sucede hoy no sucede más", expresó.
Carlos Maestro, jefe del bloque de senadores de la UCR, defendió la posición de su bancada de dar quórum para debatir la derogación de la ley, pero anticipó el voto negativo de los legisladores de su partido.
Maestro explicó que no habilitar el tratamiento de la iniciativa hubiera significado "aumentar el grado de deterioro político e institucional" del país.
Al explicar su voto negativo, el senador Raúl Alfonsín dijo que la UCR "no obstruirá" la gestión del Presidente Eduardo Duhalde, pero acusó al FMI de querer "salvar a algunos banqueros que están muy vinculados al Fondo Monetario y a los Estados Unidos".
Expresó además que "es posible que se pueda considerar que los directores del FMI están incurriendo en un acto ilícito" al buscar la anulación de la norma.
Al defender la necesidad de derogar la norma, Duhalde ha expresado que es imperiosa para reinsertar a la Argentina en el mundo y ha amenazado con renunciar si no consigue complacer al FMI con sus exigencias.