LONDRES.- El ministro británico de Asuntos Exteriores, Jack Straw, reiteró hoy que "la guerra no es inevitable" entre India y Pakistán, aunque la situación en la zona "es peligrosa".
Straw, al igual que EE.UU. y otros países accidentales, pidió el viernes a los 20.000 británicos residentes en la India "que consideren la posibilidad de abandonar" el país ante la amenaza de una guerra con Pakistán.
En declaraciones a la BBC Radio 4, Straw señaló hoy que esa recomendación es una medida "prudente y apropiada", pero que no se basa en ninguna información que haya llegado a manos de la inteligencia británica sobre una guerra inminente.
"Es claro y palpable -dijo- que la situación es peligrosa: hay un millón de hombres armados desplegados a ambos lados de la línea de control (de la disputada región de Cachemira)..., ambos países tienen armamento nuclear y uno de ellos, Pakistán, ha dicho que se reserva el derecho a ser el primero en usarlo".
Según el titular del Foreing Office, ningún miembro del Gobierno indio ha reaccionado con inquietud a su anuncio del viernes, frente a lo ocurrido en EE.UU., donde el embajador indio, Lalit Mansingh, calificó de injustificada la invitación de Washington a sus nacionales para salir de su país.
"Creo que el Ministerio de Asuntos Exteriores en Nueva Delhi ha dicho que consideran esta decisión como un asunto que concierne a estados soberanos" como el Reino Unido, explicó Straw.
El jefe de la diplomacia británica comentó también que habló con su colega indio, Jaswant Singh, para explicarle la recomendación que iba hacer a los ciudadanos británicos y no hubo ni aprobación ni reproches por parte de Singh.
Sobre la venta de armas del Reino Unido a la India, Straw apuntó que su país no suspenderá esos negocios porque "no son relevantes en la situación actual".
Pese a la escalada militar en la región, Straw se mostró partidario de mantener "las relaciones comerciales con India y Pakistán", dos países -añadió- con los que su Gobierno tiene "buenas relaciones diplomáticas".