WASHINGTON.- Estados Unidos y Cuba se reunirán mañana martes para sus conversaciones de migración semi-anuales de rutina con el objeto de "revisar la implementación de los acuerdos migratorios existentes", indicó este lunes un comunicado del departamento de Estado.
"Estados Unidos está comprometido con la implementación total de los acuerdos de migración", anunció la repartición norteamericana.
"Si bien los acuerdos han logrado ampliamente su propósito central de alentar una migración segura, legal y ordenada entre nuestros dos países, expresaremos de nuevo nuestras preocupaciones sobre las barreras restantes para la partida legal de cubanos, como piden los acuerdos", añadió.
Cuba y Estados Unidos suscribieron los acuerdos migratorios en setiembre de 1994 y mayo de 1995, poniendo fin a la llamada Crisis de los Balseros, en la cual 36.000 cubanos abandonaron la isla en precarias embarcaciones.
Según esos acuerdos, Estados Unidos se comprometió a otorgar 20.000 visas anuales a los cubanos y repatriar todos los ilegales interceptados en alta mar o en la norteamericana base naval de Guantánamo.
Cuba aceptó evitar las salidas ilegales por métodos persuasivos y reinsertar socialmente a los devueltos.
Pero la vigencia de la ley de Ajuste Cubano (1966), que privilegia con residencia automática a todos los cubanos que llegan a territorio norteamericano por cualquier vía, sigue siendo según los cubanos, un estímulo a la emigración ilegal y el contrabando de personas. De hecho, el año pasado 2.400 cubanos llegaron irregularmente a Estados Unidos.