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Comienza cumbre del G-8

La reunión de los líderes de países más industrializados del mundo parte con discusión sobre el estado de la economía global. Posteriormente conversarán sobre la lucha contra el terrorismo, antes de dedicarse a impulsar el desarrollo global sostenible.

26 de Junio de 2002 | 09:54 | Agencias
CALGARY, Canadá.- Custodiados por soldados, tanques y misiles antiaéreos, los líderes más poderosos del mundo llegaron el martes a un retiro canadiense para una cumbre que estará dominada por una polémica iniciativa de paz estadounidense para el Oriente Medio.

La cumbre del Grupo de los Ocho países más industrializados (G-8) se está efectuando en el centro turístico de Kananaskis, en las Montañas Rocosas, a la sombra de montañas cubiertas de nieve y lejos de los grupos de manifestantes que dicen que las políticas de los países ricos golpean a los más pobres.

Los líderes llegaron a la ciudad de Calgary bajo un cielo brillante y fueron recibidos por una banda militar canadiense antes de ser transportados en helicóptero a Kananaskis, donde las conversaciones formales están previstas para comenzar el miércoles.

El anfitrión de la cumbre, el Primer Ministro canadiense Jean Chretien, fue recibido por un jefe indio con la cabeza adornada por un tocado de plumas, mientras el primer ministro japonés, Junichiro Koizumi, posó para las cámaras con un sombrero vaquero de fieltro blanco.

Los líderes del G-8, entre ellos el Presidente de estados Unidos, George W. Bush, también tienen previsto discutir la guerra contra el terrorismo, la economía global y un plan para aliviar la pobreza en Africa, que Chretien dice tener cerca de su corazón, pero que según manifestantes las naciones ricas han ignorado durante muchos años.

"En Canadá esta semana, estaré discutiendo con los líderes de otras naciones industrializadas formas de poder asegurar que todos los países tomen medidas legales más enérgicas contra el terrorismo", dijo Bush en una carta divulgada el martes.

"En particular, instaré a todos los países a unírsenos haciéndose parte de estas convenciones y adheriéndose plenamente a las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU para detener el terrorismo", agregó.

Bush firmó el martes un proyecto de ley implementando dos tratados de la ONU para combatir el terrorismo, que habían languidecido hasta los ataques del de septiembre.

La legislación permite la participación estadounidense en un tratado que requiere que los países penalicen los atentados terroristas y establezcan requisitos de extradición. Un convenio separado penaliza el financiamiento de organizaciones terroristas.

Medidas tras 11 de septiembre

El G-8 dará a conocer un "plan de acción" para mejorar la seguridad en el transporte tras los ataques de septiembre, concentrándose en medidas para asegurar las cargas de los barcos y aviones, y aprovechar los acuerdos fronterizos suscritos por Estados Unidos con Canadá y México.

Sin embargo, aunque Chretien prometió mantener a Africa en el centro de las conversaciones, el tema del Oriente Medio se estaba abriendo paso lentamente hacia el tope de la agenda del G-8, integrado por Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Gran Bretaña, Italia, Japón y Rusia.

Bush expuso el lunes su muy esperado plan para una solución al conflicto del Oriente Medio, afirmando que respalda la creación de un estado provisional palestino, siempre y cuando los palestinos escojan una nueva dirigencia que "no esté comprometida con el terrorismo".

El Primer Ministro japonés, hablando en su viaje rumbo a Kananaskis, recibió con cautela la propuesta de Bush, que insta a israelíes y palestinos a dar pasos que conduzcan hacia un acuerdo de paz y a la creación de un estado palestino.

"Es algo que apreciamos, y es importante para Japón contribuir al debate sobre la creación de un estado palestino", declaró.

El secretario general de la ONU, Kofi Annan, un invitado a la parte final de la cumbre, advirtió el martes que el llamado de Bush a favor de elecciones palestinas podría resultar contraproducente, dando paso a una dirigencia más intransigente que la actual.

"Este no es el momento más adecuado para elecciones. Uno se podría encontrar en una situación en la que los radicales sean los que resulten elegidos, y sería el resultado de un proceso democrático, y tendríamos que aceptar eso", declaró.

La primera gran protesta contra la cumbre -que podría costar 330 millones de dólares por el enorme costo de la seguridad- se realizó el domingo en Calgary, a una hora de distancia en automóvil de Kananaskis, cuando 2.500 activistas -algunos de ellos desnudos- marcharon por las calles, aunque bajo un ambiente festivo donde no hizo falta la intervención policial.

Los líderes comenzarán la cumbre el miércoles en la mañana discutiendo el estado de la economía global. Posteriormente conversarán sobre la lucha contra el terrorismo, antes de dedicarse a impulsar el desarrollo global sostenible.

También se analizarán varios temas candentes, como el Oriente Medio, Afganistán y Pakistán. Las conversaciones del jueves se concentrarán exclusivamente en el plan de acción para Africa.
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