LA PAZ.- El populista Manfred Reyes Villa y el veterano político Gonzalo Sánchez de Lozada, favoritos para los comicios presidenciales del domingo, cerraon hoy viernes una reñida campaña electoral que incluso tuvo advertencias de Estados Unidos en contra de un candidato apoyado por los cultivadores de la coca.
El clima de la contienda se vio enrarecido después de que el embajador de Estados Unidos, Manuel Rocha, advirtiera el miércoles a los electores que si votaban por el líder de los campesinos cultivadores de hoja de coca, Evo Morales, Bolivia dejaría de recibir la ayuda económica de su país.
El cocalero aparece en las encuestas en cuarto lugar con entre el 12 y 13%, aunque su tendencia al ascenso puede llevarlo a superar al tercero en la lid, el ex presidente Jaime Paz Zamora, quien con el Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR) aparece con entre el 14 y el 15% de los votos.
El código Electoral establece que las campañas deben concluir 24 horas antes del día de las elecciones, lo que implica el cese de la emisión de publicidad política y cualquier otro acto proselitista. La ley también prohibe la venta y consumo de bebidas alcohólicas a partir de las cero horas del sábado.
Cuatro millones de electores, de los 8,3 millones de bolivianos, deben meditar el sábado sobre el destino de su voto que, según las encuestas, se dividirá entre Reyes Villa y el ex presidente y líder del Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR) Sánchez de Lozada (1993-97), quien aparece en ellas con entre el 17 y el 19% de los votos.
La constitución prevé que si ninguno de los candidatos logra al menos el 50% mas uno de los votos, los dos más votados deben pasar a una segunda vuelta en el Congreso, cuyas dos cámaras también serán renovadas en su totalidad el domingo.
En ese cuerpo los postulantes deben lograr al menos 66 de los 130 votos de los legisladores para llegar a la presidencia.