SAN MIGUEL DE TUCUMAN.- "La Argentina está en peligro y al borde de un derrumbe épico jamás conocido", afirmó hoy el Presidente Eduardo Duhalde durante los festejos por el Día de la Independencia en la norteña provincia de Tucumán.
En los actos oficiales la Iglesia católica realizó por su parte duras críticas al gobierno y a la dirigencia política por la "decadencia moral" que atraviesa el país.
En tanto, agrupaciones de "piqueteros" realizarán hoy junto a numerosas organizaciones sociales y políticas una serie de protestas en diversos puntos del país.
La manifestación central tendrá lugar esta tarde en la histórica Plaza de Mayo, donde confluirán los diversos sectores sociales para protestar contra de la política de Duhalde y demandar asistencia social para paliar la profunda crisis social y económica que vive el país.
Por su parte, Duhalde instó hoy a "todos los sectores sociales y políticos a trabajar unidos para volver a ser una nación libre y soberana", al hablar en la casa de la ciudad de San Miguel de Tucumán donde el 9 de julio de 1816 se proclamó la independencia de Argentina.
El Mandatario justificó asimismo el adelantamiento de los comicios presidenciales al indicar que esta renovación debe hacerse "a través del cauce institucional y de un gobierno elegido por el pueblo".
"Es inexplicable cómo teniendo tanto potencial y posibilidades hemos llegado a esta situación. Yo sé que las únicas fuerzas capaces de ayudarnos de verdad son nuestas propias fuerzas y que dependerá de nosotros mismos refundar esta bendita nación o perderlo todo". "Argentina tiene futuro, ¡viva la patria!", exhortó.
En los actos oficiales iba a participar el gobernador de Santa Fe, Carlos Reutemann, en lo que había sido interpretado como una señal de su decisión de presentarse como precandidato presidencial en las internas abiertas del Partido Justicialista (PJ, peronista) oficialista de noviembre próximo.
Sin embargo, esta mañana canceló el viaje a Tucumán por desperfectos en su avión, según informaron fuentes oficiales.
En tanto, el arzobispo de Tucumán, monseñor Héctor Villalba realizó hoy duras críticas a la dirigencia política durante el tedeum al que asistieron Duhalde y otros altos funcionarios argentinos en la catedral de la capital San Miguel de Tucumán.
"Las naciones no se mueren por ser pobres sino por ser inmorales", advirtió.
Villalba aseguró en la homilía que "hacen falta hombres con grandeza de alma que pongan remedio a la decadencia moral y social" que padece la Argentina, fruto de "la irresponsabilidad de personas y sectores con poder, que no buscan el bien común sino sus intereses egoístas".
El arzobispo alertó asimismo por la crítica situación y "la más grave injusticia" que sufren los niños sumidos en la pobreza y que no perciben la alimentación, la salud ni la educación necesaria. "Se trata de la vida de seres inocentes, no responsables por ninguna causa de la injusticia que padecen",alegó.
"En un país que exporta granos y en donde sobran los alimentos, hay niños que no comen. La desnutrición infantil está condicionando su vida como adultos". "Mientras deberían estar en la escuela, cerca de un millón de niños argentinos trabajan, a veces, hasta 10 horas por día", agregó.
