BAGRAM, Afganistán.- Cinco soldados estadounidenses resultaron heridos y dos milicianos afganos que los acompañaban murieron, al ser emboscados con armas de pequeño calibre durante una misión de reconocimiento en el sudeste de Afganistán, dijo un vocero del Ejército.
El ataque ocurrió a unos 12 kilómetros al este de la ciudad de Khost, y se prolongó por casi cuatro horas y media, según informó el coronel Roger King.
Los soldados estadounidenses heridos fueron trasladados a la principal base del Ejército en Bagram, a unos 18 kilómetros al norte de Kabul, para recibir tratamiento, si bien se confirmó que sus heridas no eran graves.
Los nombres de los soldados no han sido dados a conocer, pues está pendiente la notificación a sus familiares.
Informes iniciales señalan que por lo menos tres atacantes murieron, dijo King. Uno resultó herido y fue capturado por los estadounidenses.
El área es considerada una de las más inseguras del país y las fuerzas de la coalición dirigida por Estados Unidos han lanzado allí repetidas operaciones para buscar escondites de los talibán y de Al Qaeda.
"Nuestras fuerzas fueron atacadas desde un complejo amurallado cuando se acercaban al área", dijo el sargento Mathew Davio, otro vocero de las Fuerzas Armadas.
El episodio constituye el quinto incidente en que las fuerzas estadounidenses han sido atacadas este mes. El 13 de julio, un convoy fue atacado en la carretera entre Bagram y Kabul, sin registrarse heridos.
Dos días antes, un complejo de las Fuerzas Especiales cercano a Kandahar fue atacado con granadas y armas de pequeño calibre, en el que tampoco hubo heridos. El mismo día, en un incidente aislado un soldado sufrió una contusión cuando una bala golpeó su casco mientras patrullaba cerca de Kandahar.
El 2 de julio, un convoy fue blanco de disparos cuando volvía de un hospital en Kandahar, donde eran tratadas víctimas afganas de un ataque aéreo el día anterior. Un soldado recibió un tiro en un pie.
Desde el inicio de la campaña contra el terrorismo, 15 miembros del Ejército estadounidense han muerto en combate o en situaciones hostiles en Afganistán.
