ROMA.— En medio de gritos de "¡Vergüenza! ¡Vergüenza!", el Senado italiano aprobó hoy jueves una ley que líderes opositores dijeron pudiera ayudar al Primer Ministro Silvio Berlusconi en un caso de corrupción relacionado con su imperio de negocios.
Luego de un acalorado debate, muchos de los senadores de la oposición de centro-izquierda abandonaron la cámara alta del Parlamento en protesta antes de la votación. La propuesta, tramitada en el Senado rápidamente por la coalición conservadora de Berlusconi, fue aprobada 162-9.
La Cámara de Diputados, donde el Gobierno también goza de una amplia mayoría, debatirá la propuesta cuando regrese en septiembre tras el receso de verano.
La ley permitiría a los acusados pedir la anulación o cambio de sede de sus juicios si tienen "sospechas legítimas" de que los jueces están prejuiciados en su contra.
Berlusconi es juzgado en Milán por presuntamente sobornar a jueces durante la década de los ochenta. El Primer Ministro ha proclamado reiteradamente su inocencia en varias investigaciones y dice que es víctima de fiscales que simpatizan con la izquierda.
Los partidarios de Berlusconi dicen que la ley es necesaria para proteger a personas enjuiciadas en casos con trasfondo político.
La oposición había tratado de bloquear o demorar la aprobación de la propuesta, pero se le acabaron las tácticas.
Si es aprobada por ambas cámaras, la ley sería aplicable a casos actuales, incluyendo la de Milán en el que están involucrados Berlusconi y un ex asesor, Cesare Previtti, quien actualmente es un legislador por el gubernamental Forza Italia.