JERUSALEN.- Efectivos militares de Israel han llevado hoy a cabo una intensa ofensiva en los territorios palestinos en la que han muerto seis palestinos, entre ellos tres jefes de la resistencia de la ciudad de Tulkarem.
Según fuentes militares, entre los muertos se encuentra Ziad Daaz, sucesor de Raed Karmi, jefe de las "Brigadas de los Mártires de Al Aqsa" de Al Fatah, víctima el pasado 14 de enero de un "asesinato selectivo" de Israel.
Según las fuentes, los policías y fuerzas del Ejército, que entraron hasta el centro de la ciudad cisjordana de Tulkarem con tanques, arrestaron a 15 supuestos miembros de la resistencia después de mantener enfrentamientos armados en los que murieron otros dos activistas palestinos.
La operación estuvo a cargo de efectivos del cuerpo de elite "Mistarabim" de la policía de fronteras, que llegaron en vehículos comerciales y disfrazados de árabes al centro de Tulkarem.
Un policía de la Autoridad Nacional Palestina (ANP) murió en un choque con soldados israelíes que invadieron esta madrugada el pueblo de Beit Lahia, en el norte de la franja de Gaza, en el que también resultó herido otro palestino, se informó.
Otros dos dirigentes de facciones palestinas de la resistencia contra la ocupación israelí fueron apresados, uno de ellos, Iejiel Daamse, en el campo de refugiados palestinos de Daheishe, junto a la ciudad cisjordana de Belén.
Los soldados israelíes también arrestaron a un hijo de Daamse, al que se atribuye, entre otros atentados, un ataque suicida en el que hace unos meses murieron once civiles israelíes en Jerusalén.
La vivienda que alquilaba Daamse en el campo fue demolida por los soldados israelíes, informaron fuentes militares.
En la aldea de Yatta, al sur de Hebrón, también fue apresado Samir Bahita, líder del Movimiento de la Resistencia Islámica (Hamas), según fuentes de los organismos de seguridad de Israel.
Las operaciones coincidieron con una reunión del primer ministro israelí, Ariel Sharón, con expertos de los organismos de seguridad para evaluar los medios con que cuenta el país, y planificar su posible reacción en el caso de registrarse un temido "mega-ataque terrorista" en Israel.
Las autoridades militares israelíes informaron de que en todas esas operaciones no hubo bajas entre sus fuerzas, que junto con las de la policía de fronteras continuaban las operaciones este mediodía en Tulkarem, mientras la población se hallaba bajo toque de queda.
Por su parte, la policía israelí reveló hoy el arresto de dos muchachas árabes de Galilea, Bahri Asra de la aldea Baane, y Asadi Samia de la de Deir al-Asad, que serán juzgadas por supuesta complicidad con el terrorista de HAMAS que el domingo pasado se inmoló en un autobús de línea y causó la muerte a nueve pasajeros y más de cincuenta heridos en la carretera desde Haifa a Safed.
Según el oficial de la policia Ilán Arush, las muchachas, de 19 años, viajaban en ese autobús y bajaron del vehículo 20 minutos antes de la explosión después de que el atacante convenciera a una de ellas de que iba a ocurrir "algo terrible".
Las mujeres -que eran buscadas desde el día del atentado como sospechosas de colocar los explosivos- descendieron finalmente del autobús y llegaron a su destino en un taxi sin avisar al conductor ni dar parte a las autoridades policiales, agregó el oficial.