CARACAS.- La capital venezolana amaneció este viernes en tensa calma y bajo la custodia de la policía, luego de las violentas protestas callejeras que se registraron en el centro de la ciudad y que dejaron 15 heridos.
Los alrededores del centro de Caracas, cercanos al Congreso, fueron tomados por varios centenares de policías para garantizar el orden y evitar nuevas refriegas callejeras como las ocurridas el jueves.
El alcalde metropolitano y férreo opositor del gobierno, Alfredo Peña, declaró que la policía metropolitana se mantendrá en el centro para evitar que "grupos violentos" continúen generando disturbios.
El vicepresidente José Vicente Rangel responsabilizó a la policía metropolitana, dirigida por Peña, de los violentos sucesos del jueves, y solicitó a la Fiscalía General que abra una investigación contra el cuerpo de seguridad.
Los manifestantes protestaban por la decisión del Tribunal Supremo de Justicia, la segunda en menos de una semana, de rechazar un juicio contra cuatro militares acusados de sublevarse contra Chávez en abril.
Las manifestaciones culminaron en enfrentamientos violentos entre seguidores del Mandatario y policías que dejaron 15 heridos, de los cuales 13 fueron alcanzados por balas y dos sufrieron lesiones leves por explosivos de bajo impacto.
Entre los heridos de bala están cuatro policías y un joven estudiante de 15 años que recibió un disparo en el pecho.
En la refriega también resultó afectado un periodista italiano quien sufrió una herida leve en el pie al ser alcanzado por un objeto contundente.
En los últimos días grupos adeptos al gobierno han realizado protestas en los alrededores del palacio presidencial y el Tribunal Supremo de Justicia para exigir que se castigue a los cuatro militares rebeldes.
El proceso abierto contra el ex comandante del Ejército general Efraín Vásquez, el vicealmirante Héctor Ramírez Pérez, el contralmirante Daniel Comisso Urdaneta y el general de la fuerza aérea Pedro Pereira, ha reanimado la confrontación entre el gobierno y la oposición.
Algunos dirigentes oficialistas han anunciado que tomarán las calles del país si el Tribunal Supremo no sanciona a los cuatro altos oficiales por su participación en el fallido golpe de estado de abril.
