LIMA.- El ministro peruano de Economía, Javier Silva Ruete, dijo este sábado que Perú tiene un problema serio de financiamiento que cifró en 710 millones de dólares, que fue impulsado por la suspensión del proceso de privatizaciones en junio pasado.
La brecha no impedirá al gobierno cumplir con el compromiso pactado con el Fondo Monetario Internacional (FMI) de cerrar el año con un déficit fiscal equivalente al 2,2% del Producto Interno Bruto, precisó el titular del sector durante una exposición en el Congreso.
"Cumpliremos con la meta de 2,2% trazada con el FMI", recalcó.
Reiteró Javier Silva Ruete que el gobierno peruano recurrirá a la emisión de bonos para tratar de cubrir totalmente el forado.
Aclaró que se tratará de cubrir ese déficit con medida específicas, entre las que mencionó la emisión de bonos en el mercado internacional con la garantía parcial de la Corporación Andina de Fomento, bonos en el mercado nacional y medidas tributarias que ya fueron aprobadas por el Congreso.
Detalló que la suspensión de las privatizaciones generó un faltante de 560 millones de dólares, al que se agregaron 150 millones de demandas adicionales del presupuesto.
El responsable peruano insistió ante la representación parlamentaria que "el primer problema que tiene el gobierno está en el área fiscal, donde tenemos un faltante de 710 millones".
A pesar del déficit fiscal -que se sitúa aún en índices tolerables según agentes económicos-, la economía peruana muestra una estabilidad notoria lo que le permitirá crecer este año en alrededor del 3,5% y en 4,0% el 2003.