WASHINGTON.— Las violentas manifestaciones para intimidar a los jueces venezolanos que determinarán si procede o no un juicio a los militares que apoyaron la destitución del Presidente Hugo Chávez son "inaceptables", dijo hoy lunes el Departamento de Estado.
El proceso que involucra a cuatro oficiales generales será decidido por magistrados del Tribunal Supremo de Justicia, que ya en dos oportunidades han rechazado los proyectos de sentencias que planteaban el enjuiciamiento.
En la causa están comprendidos el ex comandante del ejército general Efraín Vásquez, el vicealmirante Héctor Ramírez Pérez, el contralmirante Daniel Comisso Urdaneta y el general de la Fuerza Aérea Pedro Pereira.
Los cuatro han sido señalados por el Gobierno y la Fiscalía General de haber dirigido en abril una sublevación militar contra Chávez, quien retornó al poder luego de ser temporalmente depuesto.
PA las violentas manifestaciones de presión de parte de oficialistas para presionar a los magistrados se ha sumado ahora la advertencia del propio presidente de que una decisión de no enjuiciar sería rechazada por él y las fuerzas militares.
"No vamos a formular un comentario sobre esos procesos judiciales en marcha, dijo el portavoz Philip Reeker, pero pensamos que las violentas manifestaciones para intimidar a la corte son inaceptables".
Reeker no formuló un comentario directamente sobre la advertencia de Chávez, quien habló al respecto en el fin de semana en su programa radio-televisado. Pero, dijo que "es importante" el respeto a la independencia del sistema judicial. "Es esencial para la vitalidad de la democracia de Venezuela", agregó.
"Ciertamente, exhortamos a los venezolanos a respetar la decisión final de la corte en este asunto, cualquiera que ella sea".
"Vamos a continuar observando el desarrollo de los acontecimientos, pero nos mantendremos alertas a que se dé un respeto por las cortes y respeto por el orden constitucional en Venezuela".