MONUMENTO NACIONAL MONTE RUSHMORE, EE.UU..- El Presidente estadounidense, George W. Bush, acusó el jueves al Senado de atar las manos de su propuesto Departamento de Seguridad Territorial, a lo que el líder demócrata de esa cámara respondió que el mandatario quiere "poderes dictatoriales".
El intercambio, que no fue directo, se produjo bajo la mirada de los graves y enormes rostros de cuatro presidentes estadounidenses, esculpidos en una pared de granito del Monte Rushmore, en el estado de Dakota del Sur.
Bush sugirió que el Senado está poniendo límites peligrosos a su capacidad de proteger a la nación mediante el Departamento de Seguridad Territorial, de 170.000 miembros y cuya creación propuso tras los ataques del 11 de septiembre.
"Necesito la flexibilidad de poder mirar al pueblo estadounidense y decirle que estamos haciendo todo lo posible por proteger a la patria contra un enemigo que nos odia", dijo Bush enérgicamente a una audiencia entre la que estaba Daschle.
El líder del Senado, quien lo escuchó con las manos cruzadas frente a él, acusó luego al presidente de buscar "poderes dictatoriales", particularmente la libertad de despedir a empleados del gobierno y el derecho a transferir dinero de un organismo a otro sin aprobación del Congreso.
Los miembros del opositor Partido Demócrata en el Senado no quieren "dar a este presidente o a ningún presidente poderes dictatoriales que creo comprometen los mecanismos de supervisión que reconocieron nuestros patricios", dijo Daschle a la prensa.
A la pregunta de qué quería decir, Daschle replicó: "La capacidad de despedir a un empleado en el acto; la capacidad de mover recursos sin aprobación del Congreso de un organismo a otro. Esos son poderes que ningún presidente ha tenido y que creemos éste tampoco debería tener".
Los republicanos y los demócratas están en desacuerdo sobre las protecciones de las que disfrutarían los empleados del propuesto departamento y la capacidad del gobierno para transferir dinero en su esfuerzo por prevenir otros ataques contra Estados Unidos.
Bush también aprovechó su visita a los bustos de 18 metros de los presidentes George Washington, Thomas Jefferson, Theodore Roosevelt y Abraham Lincoln para promover a John Thune, de Dakota del Sur, un candidato republicano que está en una reñida lucha por un escaño en el Senado que se disputará en las elecciones legislativas del 5 de noviembre.
El presidente espera que Thune logre vencer al senador Tim Johnson, quien también asistió al discurso, y ayude a los republicanos a recuperar el control del Senado y a arrebatarle a Daschle el cargo de líder de la mayoría.
"Agradezco su liderazgo y su amistad", dijo Bush a Thune al inicio de su discurso.
El control del Senado es vital para las políticas de Bush. La Cámara de Representantes, liderada por los republicanos, aprobó un proyecto de ley para crear un Departamento de Seguridad Territorial al gusto de Bush, pero el Senado todavía no lo ha hecho.
Una versión aprobada a nivel de comisión no suministra ninguno de los poderes que Bush quiere.
Tras un recorrido de dos días por el oeste medio en el que recaudó fondos para candidatos republicanos de Wisconsin y Iowa, Bush regresará el jueves a su rancho en Crawford, Texas, para reanudar sus vacaciones de cuatro semanas, que interrumpió para participar en una cumbre económica esta semana en Waco.