BUENOS AIRES.- El ex presidente argentino Adolfo Rodríguez Saá y la diputada opositora Elisa Carrió se encuentran técnicamente empatados en la carrera por los comicios presidenciales argentinos de marzo del 2003, según un sondeo dado a conocer este domingo por la encuestadora Ibope.
Rodríguez Saá, presidente peronista tan sólo por siete días a fines del 2001, logra el 15,6 por ciento de las adhesiones.
En tanto, la diputada Elisa Carrió, titular de la Agrupación de Centroizquierda Argentina por una República de Iguales (ARI), conquista al 15,3 por ciento de los encuestados.
"Todas las encuestas registran esta suerte de empate técnico, porque aunque hay que tener en cuenta el margen de error, una diferencia como esta es mínima. En los hechos, cualquiera de los dos (Rodríaguez Saá o Carrió) puede estar arriba o abajo", aseguró Enrigue Zuleta Puceiro, encuestador de Ibope, quien agregó que con este resultado resulta imposible ptredecir quién de los dos podría ganar las elecciones.
Adolfo Rodríguez Saá fue gobernador de la provincia de San Luis por 18 años y asumió la conducción del país a fines de diciembre del año pasado cuando el ex presidente Fernando de la Rúa se vio obligado a renunciar ante una revuelta popular que dejó casi 30 muertos.
En su breve gestión, Rodríguez Saá carga con la cruz de haber sido el presidente que declaró la cesación del pago de la deuda externa argentina -de 103.000 millones de dólares-, aplaudido de pie por casi toda la asamblea legislativa que lo eligió.
La economía argentina no crecía desde 1998 y la abultada deuda externa se tornaba impagable. Pero la declaración del cese del pago de los compromisos financieros de Argentina y una posterior devaluació del peso sumieron al país en una crisis sin precedentes.
El gobierno de "El Adolfo", como se le conoce a Rodríguez Saá, fue efímero ya que los gobernadores peronistas -que lo habían elevado a la presidencia- le quitaron su apoyo, por lo que se vio obligado a renunciar.
Sin embargo, su resurgimiento en las encuestas viene acompañado de su carisma y su amplia convocatoria ideológica, según Zuleta Puceiro.
"La presencia de gente de muy diversa extracción social, (de muy diversa) pertenencia político-ideológica tiene que ver con que todos buscan una alternativa, tiene que ver con la desesperación", aseguró el encuestador.
Rodríguez Saá se apresta a disputar la interna del partido peronista con el ex presidente Carlos Menem, y los gobernadores de Córdoba, José Manuel de la Sota, de Salta, Juan Carlos Romero, y de Santa Cruz, Néstor Kirchner.
En tanto, Elisa Carrió se erige como candidata exclusiva de la fuerza que lidera, creada apenas el año pasado.
La diputada saltó en popularidad durante los últimos años al denunciar el lavado de dinero proveniente del narcotráfico en Argentina, y es una férrea enemiga del ex presidente Menem.
La candidata culpa a los partidos políticos mayoritarios y tradicionales de Argentina, el peronismo y la Unión Cívica Radical, por la crisis económica que atraviesa el país.
Las elecciones presidenciales argentinas serán en marzo del 2003 y el traspaso de mando está previsto para el 25 de mayo.
Quien resulte ganador de las elecciones presidenciales de marzo heredará un país desvastado económica y socialmente, en cesación de pagos y con un sistema financiero colapsado tras una masiva fuga de depósitos durante el 2001 que obligó al presidente Eduardo Duhalde a congelar los ahorros de la población en enero.
También deberá enfrentar la pobreza que afecta a la mitad de una población de 36 millones de habitantes, y el desempleo, en un país donde casi una de cada cuatro personas económicamente activa no tiene trabajo. Reut 14:03 08-18-02