JERUSALÉN.- Israel decidió este sábado congelar por el momento su retirada gradual de las zonas autónomas de Cisjordania y Gaza supeditándola a una lucha más eficaz por parte de la Autoridad palestina contra los grupos armados.
’’Mientras los servicios de seguridad palestinos no impongan su ley a los grupos armados terroristas que controlan las calles, no podrá haber retirada. De todas maneras los acuerdos concluidos no prevén un calendario preciso’’, declaró a la AFP un dirigente israelí que pidió no ser identificado.
El plan, elaborado el 18 de agosto por el ministro israelí de Defensa Binyamin Ben Eliezer y el ministro palestino del Interior, Abdelrazak al-Yahya, prevé una retirada gradual israelí de las zonas reocupadas desde el comienzo de la Intifada en septiembre de 2000, donde la seguridad palestina estará encargada de mantener la calma e impedir ataques.
En virtud de este plan, Israel se retiró el lunes de Belén, en Cisjordania. La retirada de Gaza inicialmente prevista no pudo llevarse a cabo a causa de la persistencia de la violencia.
Los principales grupos armados palestinos, responsables de atentados sangrientos anti-israelíes, rechazaron ese plan y se comprometieron a continuar la lucha contra Israel, pese a un encuentro con Yahya.
Durante una reunión el viernes, los militares israelíes informaron a responsables palestinos de su negativa a proceder a una retirada en la ciudad de Hebrón, en Cisjordania, sobre la cual se había hablado desde hacía varios días.
Nabil Abu Rudeina, consejero del presidente palestinos Yasser Arafat, acusó a Israel de no haber cumplido con los compromisos que adquirió dentro del marco del plan de retirada.
La Autoridad palestina ha afirmado en varias oportunidades que hacía esfuerzos para parar los ataques contra Israel con el fin de permitir una retirada de las zonas reocupadas desde septiembre de 2000.
El ejército israelí procedió entretanto a una incursión en Hussán, cerca de Belén, y detuvo a cerca de cincuenta palestinos, indicaron testigos.
Por otro lado Estados Unidos enviará la próxima semana un emisario al Medio Oriente para promover el nombramiento de un Primer ministro palestino con el objetivo de marginar al presidente Arafat, según el mismo alto responsable israelí.
El responsable adjunto de la oficina del Medio Oriente en el Departamento de Estado, David Satterfield, efectuará una gira por Israel, así como por varios países árabes, con el fin de defender esta idea, añadió.
"Tanto Estados Unidos como Israel consideran que antes de organizar elecciones legislativas es necesario aplicar un modelo como el utilizado en Afganistán con la formación de un gobierno provisional dirigido por un Primer ministro que inicie verdaderas reformas económicas e institucionales", añadió el dirigente israelí.