BELGRADO.- El ex Presidente yugoslavo Slobodan Milosevic, procesado por crímenes de guerra ante el Tribunal Penal Internacional para la ex Yugoslavia (TPIY), con sede en La Haya, devolvió hoy la acusación a la OTAN, a la que responsabilizó por el bombardeo de una prisión kosovar en mayo de 1999.
Milosevic acusó a la Organización del Tratado del Atlántico Norte de la muerte de 180 personas en la ofensiva contra la cárcel de Dubrava. Sin embargo, un ex presidiario del lugar declaró ante el tribunal que los muertos fueron 23.
El testigo acusó a los guardias serbios de perpetrar una masacre entre los presidiarios cuando comenzaron a caer las bombas. Según su relato, los agentes serbios mataron a 97 personas en el lugar.
Por su parte, la periodista de la BBC Jacky Rowland confirmó que las autoridades serbias mostraron el lugar destrozado a la prensa que cubría la guerra de Kosovo.
La reportera, que visitó la cárcel con su equipo en dos oportunidades, contó 44 cadáveres.
El director de la prisión aseguró que los bombarderos de la OTAN atacaron el recinto durante dos días consecutivos. Según Rowland, los periodistas no pudieron moverse libremente durante su visita a la prisión.
Musa Krasniqi, encarcelado en ese momento por su pertenencia al Ejército de Liberación de Kosovo (UCK), confirmó el bombardeo, pero aseguró que los guardias dispararon contra los reclusos con armas semiautomáticas después de reunirlos en un descampado cercano.
Milosevic, que lleva personalmente su defensa, acusó a los testigos de inventar los datos sobre la masacre. "¿Por qué no dicen la verdad?", preguntó a los que pasaban por el estrado. El ex Mandatario acusó a la fiscalía de efectuar "manipulaciones con cintas de video y testimonios de ejecuciones que no han existido".
Para negar su responsabilidad en la masacre de la prisión de Dubrava, sostuvo una fotografía del lugar después del bombardeo de la OTAN. "Debería Usted ver también las fotos", recomendó al juez Richard May.
El juicio de Milosevic, que se lleva a cabo desde el pasado 12 de febrero, ha tenido que ser interrumpido en varias ocasiones, incluso durante semanas, a petición del acusado, quien alegó problemas de salud, especialmente con la presión arterial.
En ese sentido, el equipo médico del TPIY aconsejó que se redujeran las comparecencias de Milosevic ante los jueces para evitar un excesivo estrés. El ex Presidente yugoslavo ha estado tres veces enfermo desde que se inició el juicio.
El proceso continuará mañana con el testimonio ampliado de la periodista Jacky Rowland.