WASHINGTON.- El Presidente de EE.UU., George W. Bush, reafirmó hoy la voluntad de su Gobierno de ganar la guerra contra el terrorismo internacional, durante su intervención en la ceremonia del Pentágono que recordó el atentado de hace un año.
El Mandatario norteamericano sostuvo en su discurso después de un homenaje a las víctimas del Pentágono, que los terroristas fracasaron en su intento de desmoralizar a EE.UU.
"Hoy recordamos cada vida perdida, reinauguramos este orgulloso símbolo y renovamos nuestro compromiso de ganar la guerra que comenzó aquí", afirmó Bush.
"Hace un año, hombres, mujeres y niños fueron asesinados aquí porque eran estadounidenses, y porque este lugar es un símbolo del poder y la determinación de este país", agregó.
Bush aseguró que los terroristas "fracasaron en su intento de desmoralizar a nuestro país" y destacó cómo desde entonces se ha detenido a más de 2.000 presuntos terroristas en todo el mundo y se han congelado millones de dólares en activos de sus organizaciones.
También reiteró el apoyo y la confianza en los miembros de las Fuerzas Armadas y aseguró que las 189 víctimas de este atentado "no murieron en vano".
La ceremonia del Pentágono comenzó con el despliegue de una gran bandera en la reconstruida fachada del edificio contra la que se estrelló hace un año uno de los cuatro aviones secuestrados por terroristas de Al Qaeda.
Renee Williams, a la izquierda, y su madre Dale Ann Williams, ponen flores en el memorial temporal instalado en Shanksville, donde se estrelló el cuarto avión.
Bush y el secretario de Defensa, Donald Rumsfeld, presiden este acto que tiene lugar a la misma hora en la que un avión de American Airlines secuestrado se empotró contra el Departamento de Defensa.
En su intervención, Rumsfeld destacó que "hace un año, esto era un campo de batalla, con humo, torres en llamas y piedra quebrada".
El secretario de Defensa señaló que "no debemos olvidar lo que ocurrió aquí", cuando hombres y mujeres se lanzaron a rescatar a numerosos heridos entre los escombros ardientes del lado oeste de la sede del Pentágono.
Rumsfeld agradeció el apoyo que los aliados han prestado a EE.UU. en la guerra contra el terrorismo que Washington lanzó el 7 de octubre del pasado año, cuando todavía no se había cumplido un mes de los peores atentados de su historia.
Antes de dar comienzo la ceremonia, un capellán castrense pronunció una oración inicial por las 189 víctimas y sus familiares.
El acto del Pentágono sigue al minuto de silencio que se guardó en todo EE.UU. a las 8.46 de la mañana (12.46 GMT), coincidiendo con el impacto del primer avión contra la Torre Sur del World Trade Center, en Nueva York.
La sede del Pentágono y varias bases alrededor de Washington están protegidas desde el martes por misiles antiaéreos.
La colocación de los misiles se decidió después de que el Gobierno elevó el nivel de alerta ante posibles atentados terroristas.
Tropas equipadas con equipos y trajes de combate vigilan los accesos y los alrededores del Pentágono.
La reconstrucción del lado oeste del edificio se realizó contrarreloj para tenerla acabada para el aniversario de hoy.
Varios miles de trabajadores se turnaron en las obras, que costaron 501
millones de dólares, según cifras oficiales.