EMOLTV

Ucrania en el punto de mira de EE.UU. y la OTAN por venta de armas a Irak

Acorralado por las sospechas exteriores, el presidente de Ucrania dio ayer viernes el visto bueno para que desde la semana próxima llegue a Kíev un grupo de inspectores internacionales para investigar las presuntas relaciones armamentísticas con Irak.

28 de Septiembre de 2002 | 11:31 | EFE
Kiev, Ucrania.- Ucrania se encuentra en el ojo del huracán de las críticas de Estados Unidos y la OTAN, quienes sospechan de que el régimen del presidente Leonid Kuchma vendió armas a Irak y ahora indagan sobre la "pista rusa" de ese contrabando ilegal.

Acorralado por la grave crisis política interna y las sospechas exteriores, Kuchma dio ayer viernes el visto bueno para que desde la semana próxima llegue a Kíev un grupo de inspectores internacionales para investigar las presuntas relaciones armamentísticas con Irak.

Estas acusaciones no son nuevas y hace unos meses ya apuntaron a la vecina Bielorrusia, que desvió la denuncia hacia la todopoderosa industria de armamento rusa y sus contactos en el Kremlin, que ahora de nuevo es escrutado con recelo por los "halcones" de Washington.

El escándalo renació esta semana cuando Estados Unidos dijo que consideraba auténticas unas grabaciones hechas en secreto en el despacho de Kuchma y en las que el presidente autorizaba la venta del sistema de radar "Kolchuga" (Cota de Malla) a Irak.

Este radar podría dar a Irak una gran ventaja estratégica en caso de un ataque estadounidense, pues es capaz de detectar aviones a 800 kilómetros de distancia y blancos terrestres a 600 kilómetros.

Al ser un radar de tipo pasivo, el "Kolchuga" no emite señales detectables por el enemigo cuando pasa información sobre sus blancos a las bases de misiles encargadas de destruirlos.

Las cerca de 300 horas de grabaciones las hizo un guardaespaldas de Kuchma hace dos años antes de fugarse a EEUU, y en ellas también se recogía el visto bueno de Kuchma para eliminar a un periodista opositor, Gueorgui Gongadze, cuyo cadáver fue hallado sin cabeza.

El líder socialista y opositor ucraniano, Olexander Moroz, dio a conocer en noviembre de 2000 al Parlamento del país las grabaciones sobre el asesinato de Gongadze, lo que originó una crisis política y un movimiento de oposición popular que recobró fuerza este mes.

Los opositores reclaman la caída de Kuchma por "corrupto" y "asesino", y piden que se investigue la violación por su régimen del sistema de sanciones que pesan sobre Irak con la presunta venta de armas ucranianas.

En las cintas, Kuchma hablaba de la venta a Irak de cuatro sistemas "Kolchuga" con Valeri Malev, entonces director de la agencia de exportación de armas y quien pereció en un accidente aéreo tras las primeras filtraciones sobre el "Irakgate" ucraniano.

Según las grabaciones, Kuchma habría dado el visto bueno a la venta por cien millones de dólares y sugirió enviarlos a Irak camuflados en los transportes de camiones Kraz, junto con un equipo de expertos con pasaportes falsos para montarlos.

Tras conocerse la autenticidad de las grabaciones, la Casa Blanca anunció que suspenderá sus 55 millones de dólares de ayuda a Ucrania si se confirma la venta de radares a Irak.

El secretario general de la OTAN, George Robertson, exigió explicaciones a Kiev sobre este contrabando y sobre sus relaciones con Bagdad, en unos momentos "especialmente críticos" en las relaciones entre la Alianza y Ucrania.

El ministro ucraniano de Exteriores, Anatoli Zlenko, dijo ayer que había confirmado a la OTAN la intención de Kíev de aceptar inspectores internacionales.

Zlenko indicó que no había advertido en sus conversaciones con Robertson ningún signo de que este organismo fuera también a revisar sus relaciones con Ucrania.

Además de los inspectores, en Kíev se espera la próxima semana a la subsecretaria de Estado norteamericana para asuntos de Eurasia, Elizabeth Jones, para tratar de los radares con la Administración Kuchma.

El Gobierno ucraniano ha achacado esta presión exterior a la campaña pro occidental de los opositores contrarios a las buenas relaciones de Kuchma con Moscú, que hasta ahora ha permanecido en silencio sobre el asunto del "Kolchuga".

Sin embargo, el embajador de Estados Unidos en Kiev, Carlos Pascual, señaló hace dos días que su país no sólo investigará la transferencia del "Kolchuga" a Irak por Ucrania, sino que también indagará sobre la posibilidad de que Rusia esté implicada.

El sistema "Kolchuga" fue desarrollado por la Unión Soviética en 1985 y entró en servicio un año después; al caer la URSS en 1991, Rusia se hizo cargo de la mayor parte de las unidades que había en Ucrania, que sólo reconoce haber fabricado cuatro desde entonces.

Cuando hace meses se acusó también a Bielorrusia de vender armas a Irak, varios destacados políticos de ese país, entre ellos el ex jefe de Estado Stanislav Shushkévich, achacaron a la industria militar rusa el utilizar a otros países eslavos como intermediarios para colocar armas de última generación en Irán e Irak.
EL COMENTARISTA OPINA
¿Cómo puedo ser parte del Comentarista Opina?