GINEBRA.- Estados Unidos aumentará la ayuda a los refugiados que han regresado a Afganistán en los últimos meses, indicó hoy, martes, el subsecretario de asuntos de Refugiados, Gene Dewey.
La contribución estadounidense pasará del 25 por ciento al 30 por ciento, indicó Dewey en una conferencia de prensa en Ginebra, donde participa en la reunión anual del Consejo Ejecutivo de la Alta Comisaría de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), organismo en el que trabajó anteriormente.
Precisó que EE.UU. ha entregado unos 60 millones de dólares a la ACNUR de los 271 millones necesarios para hacer frente a los programas de ayuda a esas personas.
"Hemos tenido que aumentar nuestra contribución porque otros países no han sido tan generosos como se esperaba", dijo el dirigente de la oficina de Población, Refugiados y Migraciones de EE.UU.
Dewey indicó que el principal problema que los refugiados afganos afrontan es la falta de alimentos y calculó que serán necesarios todavía entre 70.000 y 80.000 toneladas más de alimentos para los próximos meses.
Agregó que además del invierno, la población afgana podría atravesar "una situación crítica también en primavera", ya que no podrá disponer de cosechas hasta el próximo verano.
Según Dewey, si no se presta ayuda a los refugiados afganos que regresan, existe el riesgo de que vuelvan a marchar hacia los países vecinos.
Dewey indicó que 1,7 millones afganos han vuelto a sus hogares en los últimos meses, lo que constituye "el mayor retorno masivo de la historia de los refugiados".
A principios de año la ACNUR calculó que unos tres millones de afganos permanecían refugiados, la mayoría en los vecinos Pakistán e Irán.