JERUSALEN.- El Primer Ministro de Israel, Ariel Sharon, pretende nombrar nuevo ministro de Defensa al ex jefe del Estado Mayor, Shaul Mofaz, en sustitución del laborista Benjamin Ben- Eliezer, quien presentó ayer su renuncia junto con su colega de Relaciones Exteriores, Shimon Peres, según informó hoy Radio Israel.
Mofaz, quien abandonó el cargo de jefe del Estado Mayor hace pocos meses, es considerado un representante de la derecha israelí que siempre ha defendido una política militar dura hacia los palestinos.
Según la radio israelí, Peres rechazó una oferta de Sharon para desempeñarse como enviado especial del jefe de gobierno.
Sharon mantuvo hoy los primeros contactos con una alianza radical de derecha que le podría garantizar una nueva mayoría de 63 sobre los 120 mandatos de la Knesset (Parlamento israelí), tras la ruptura en la víspera del gobierno de coalición de su partido, el derechista Likud, con los laboristas.
Ben-Eliezer criticó por su parte la designación de Mofaz al frente de Defensa. Mofaz no tiene experiencia en materia política, y existe el peligro de que actúe como jefe militar más que como ministro, dijo el líder laborista. Al mismo tiempo, Ben-Eliezer subrayó que no hay "ninguna posibilidad" de que retire su dimisión.
Por su parte, la dirigencia palestina manifestó que un nuevo gobierno encabezado por Sharon pero apoyado en los partidos de la ultraderecha israelí constituye "una amenaza no sólo para los palestinos, sino para toda la región".
Nabil Abu Rudeineh, asesor del presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Yasser Arafat, instó a la comunidad internacional a que envíe tropas de observación a Cercano Oriente.
La ANP desea en Israel "un gobierno que continúe el proceso de paz y ponga fin a la escalada militar", dijo Rudeineh.
Sin embargo, el ministro palestino de Información, Yasser Abed Rabbo, indicó que no espera grandes cambios en caso de que Sharon acuerde gobernar con la ultraderecha, ya que "hasta ahora, la política estuvo determinada por el Likud".
Sharon informó en la noche del miércoles al presidente israelí, Mosche Katzav, que se propone formar una coalición para seguir gobernando hasta fin de año y aprobar el presupuesto de 2003, que provocó la salida de los laboristas.
Después, el Primer Ministro considerará la posibilidad de convocar nuevas elecciones, señalaron hoy medios israelíes.