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Policía europea reconoce que no puede con ciberdelincuentes

"Es obvio que con el ciberdelito hemos perdido la batalla incluso antes de comenzar a luchar. No podemos mantener el ritmo de ellos", dijo un funcionario de Europol.

01 de Noviembre de 2002 | 15:36 | Reuters
LONDRES.- Europa está perdiendo su lucha contra la delincuencia cibernética, dijo el viernes Rolf Hegel, jefe del departamento de delitos graves de la organización policial Europol.

"Es obvio que con el ciberdelito hemos perdido la batalla incluso antes de comenzar a luchar. No podemos mantener el ritmo de ellos", dijo el funcionario.


La amplia amenaza del ciberdelito ha tenido en vilo a la policía desde hace años. Y ahora hay contundentes pruebas de que grupos criminales organizados están usando nuevas tecnologías para cometer delitos comunes y algunos nuevos.

La Internet y los teléfonos móviles se han convertido en una herramienta confiable para los delincuentes, según los expertos.

Los usan las bandas de pornografía infantil y de otro tipo en crímenes que están afectando cada vez con más regularidad al mundo empresarial con las amenazas de lanzar ataques contra redes de computadoras para extorsionar compañías.

La policía no puede marchar al mismo ritmo. "Estamos muy atrás", dijo Hegel ante la conferencia de seguridad de computadoras Compsec 2002 que se celebra aquí.

El mes pasado, Europol formó el Centro de Delitos de Alta Tecnología, un grupo especializado cuya misión es coordinar las investigaciones de cibercrímenes internacionales en Europa.

Hegel dijo que la fuerza tiene poco personal y pocos recursos ahora, pero espera que comience a hacer una diferencia en el futuro.

Hay un sentido de urgencia en la comunidad policial de que se deben fortalecer sus capacidades de investigación de delitos digitales.

Un ataque coordinado contra un puñado de servidores radicales centrales de Internet a principios de este mes dejó perplejas a las autoridades policiales, creando temores de que podría ser obra de un grupo criminal organizado con el fin de perturbar las redes vitales de comunicación.
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