BAGDAD.- Rusia instó este viernes a los inspectores de armas de las Naciones Unidas a que regresen a Bagdad para enfocarse exclusivamente en la tarea del desarme, mientras la prensa iraquí dijo que los expertos deben ser objetivos y estar libres de la influencia estadounidense.
Moscú, un aliado de Bagdad desde los días de la Unión Soviética por tener importantes intereses petroleros en ese país, quiere asegurarse de que los expertos de la ONU no sean utilizados por Washington como justificación para una invasión militar que tenga como fin derrocar al Presidente Saddam Hussein.
El viceministro ruso de Relaciones Exteriores, Yuri Fedotov, dijo que los inspectores deben comparar el actual armamento de Irak con el que existía a fines de 1998, cuando el jefe de los inspectores, Richard Butler, abandonó unilateralmente a Irak diciendo que Bagdad no cooperaba.
"Fue así como él allanó el camino para los ataques aéreos contra ese país", dijo Fedotov a la agencia de prensa Itar-Tass.
En esta ocasión, agregó Fedotov, cualquier complicación debe ser llevada ante el Consejo de Seguridad de la ONU.
Un equipo de avanzada de los técnicos de la ONU tiene previsto llegar a Bagdad el próximo lunes para preparar la tarea de los inspectores de armas, que deben comenzar sus labores una o dos semanas después.
El grupo estará acompañado por el jefe de inspectores de armas de la ONU, Hans Blix, y el director general de la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA), Mohamed ElBaradei.
El embajador de Rusia ante la ONU, Sergei Lavrov, dijo que esperaba que los inspectores hayan aprendido las lecciones que dejaron los anteriores expertos que estuvieron en Irak, quienes realizaron "tareas que no tenían nada que ver con la necesidad de eliminar armas de exterminio masivo".
"Métodos crudos y arrogantes fueron utilizados, ignorando la soberanía y la dignidad de Irak y su pueblo", dijo el jueves por la noche a la televisión rusa.
El Gobierno de Saddam Hussein aceptó el miércoles una nueva resolución de la ONU que da a Bagdad una última oportunidad para que se desarme y allana el camino para el regreso de los inspectores de armas tras una ausencia de cuatro años.
Estados Unidos, no obstante, reiteró el jueves que una fuerza militar sería utilizada par derrocar a Hussein si el Presidente iraquí no cumple los términos de la resolución.
Irak pide objetividad a los inspectores
El diario oficial de Irak, al-Thawra, portavoz del gobernante Partido Baath de Hussein, señaló que la aceptación de Bagdad de la nueva y dura resolución, pondrá a prueba la credibilidad de las Naciones Unidas y dijo que los inspectores deben ser honestos y objetivos.
"Lo más importante es que los equipos de inspecciones se mantengan alejados de la influencia estadounidense y sionista, que tomará diversas formas, como sobornos, chantajes, amenazas y el reclutamiento de espías bajo la etiqueta de expertos", dijo el periódico al-Thawra.
La prensa iraquí ha repetido la afirmación de Bagdad de que no existen armas de exterminio masivo en el país y dijo que la cooperación de Irak debe ser recompensada con el levantamiento de las sanciones impuestas por la ONU, tras la invasión a Kuwait en 1990.
"Estados Unidos también tratará de confundir y complicar la tarea de los inspectores para crear una crisis con Irak que permita a Washington poner en marcha sus amenazas de guerra", dijo la prensa iraquí.
Sin embargo, el director general de la AIEA ha dicho que no informará al Consejo de Seguridad de cualquier omisión menor o no intencionada en un informe sobre armas que Irak está obligado a presentar, postura que lo pone en desacuerdo con la política de "tolerancia cero" del Presidente estadounidense, George W. Bush.
ElBaradei dijo en Washington que "si hay una omisión menor y ésta es claramente involuntaria, no vamos a correr al Consejo de Seguridad a decir que ha habido una violación material" de la resolución.