JERUSALÉN.- Los servicios de espionaje de Israel, Mossad, han sido puestos a cargo de la investigación de los dos atentados que hoy fueron perpetrados contra objetivos israelíes en Kenia, y que según fuentes oficiales, costaron la vida a tres israelíes.
El Primer Ministro israelí, Ariel Sharon, que hoy dejaba sus compromisos electorales de lado para seguir la situación tras los atentados, encargó al Mosad la investigación y ha convocado para las 14.00 hora local (12:00 GMT) una reunión de emergencia con altos mandos militares y de los servicios secretos, en el Ministerio de Defensa.
El Mossad, a cargo de todas las actividades israelíes relacionas con la seguridad en el extranjero, tiene vastas conexiones en Kenia desde hace años, y ambos países han colaborado estrechamente en asuntos de seguridad.
Kenia es uno de los países de África más visitados por israelíes y uno
de los pocos con conexión aérea directa y numerosas inversiones de capital israelí en ése y otros sectores.
De hecho, el hotel atacado esta mañana en Mombasa es de propiedad israelí, como así también otros de la zona, conocida como Malindi.
Testigos de lo sucedido, entre ellos un reportero del diario Jerusalem Post que acababa de llegar al hotel, dijeron que un vehículo con tres personas de fisonomía árabe irrumpió en el hotel y comenzó a lanzar bombas, tras lo cual el vehículo estalló.
El ministro israelí de Asuntos Exteriores, Benjamín Netanyahu, informó de que entre las once víctimas hay tres israelíes, y entre ellos dos niños.
No obstante, un portavoz de la Policía de Kenia dijo que en el ataque murieron los tres suicidas, seis keniatas y sólo dos israelíes.
También fue atacado al parecer un avión de la compañía israelí de vuelos chárter Arkía, cuyos pilotos informaron de dos focos de luz que pasaron a gran velocidad al lado del avión, lo que podría indicar un ataque con misiles.
Por el momento, ninguna fuente ha confirmado que se trate de misiles pero esa es a conjetura que se baraja desde esta mañana.
